Belfast, Irlanda del Norte. Gran Bretaña publicó hoy un esperado plan para reformar a la policía de Irlanda del Norte, pero la reacción hostil de católicos y protestantes ilustró la persistencia de tensiones que amenazan al acuerdo de paz del área.
El plan para reformar a la Real Gendarmería del Ulster fue publicado en un documento de 70 páginas, tras semanas de filtraciones de información y olas de conjeturas por su contenido.
El plan busca abolir la fuerza policial de 2.400 elementos, la mayoría protestante, dentro de tres años, cerrar el próximo mes el último centro de interrogatorios antiterroristas y poner a la secreta unidad de inteligencia de la gendarmería, la División Especial, bajo mayor supervisión del público.
El secretario de Estado para Irlanda del Norte, John Reid, pidió a los políticos, especialmente católicos, que confirmen el martes a más tardar si participarían de una Junta Policial bajo control civil, la cual se encargaría de reformar la gendarmería. Hasta el momento, los dirigentes católicos se han negado.
El comandante de la gendarmería, Ronnie Flanagan, también pidió a los católicos su apoyo. ``Si el plan recibe un amplio apoyo rn las diferentes comunidades, no tengo la menor duda de que servirá como la guía para una labor policial efectiva'', dijo.
El primer ministro irlandés Bertie Ahern también pidió a las partes que den ``su consideración'' a la designación de miembros para la Junta Policial.
El informe representa un primer intento británico para establecer un equilibrio entre las demandas protestantes y católicas, las cuales amenazan al gobierno conjunto local, logrado gracias al acuerdo suscrito el Viernes Santo de 1998. Los protestantes amenazan con romper la coalición a fines de septiembre, a menos que el Ejército Republicano Irlandés (ERI) inicia su desarme, algo que nuevamente rechazó esta semana el grupo armado.
Los protestantes dijeron que el plan representaba otro intento británico por comprar el desarme del ERI, cuyo brazo político, el Sinn Fein, forma parte del gobierno conjunto.
``El ERI ha asesinado a miles de policías. Los terroristas no descansarán hasta que Gran Bretaña haya aceptado eliminar totalmente la Real Gendarmería del Ulster, particularmente ahora que los terroristas forman parte de nuestro gobierno'', dijo Ian Paisley Jr., vocero para Seguridad de los Unionistas Democráticos, el grupo protestante más extremista dentro del gobierno conjunto.
Edición periodística: Adriana Quirós Robinson, Nacion.com Fuente: agencias.