
LA PAZ (AFP) - Las enfermedades como malaria, dengue y tétanos configuran un nuevo cuadro de emergencia sanitaria en Bolivia, en momentos en que las lluvias, desbordes de ríos e inundaciones comienzan a amainar luego de dos meses de flagelo climático producto de la corriente de El Niño.
Brigadas médicas iniciaron una vasta campaña de vacunación y fumigación en la región amazónica boliviana, azotada por las inundaciones, según la ministra de Salud, Nila Heredia.
La autoridad temió el rebrote de la malaria a causa de las aguas estancadas, y el contagio de tétanos como consecuencia de la muerte de reses cuyos restos flotan por las poblaciones afectadas por las inundaciones y riadas.
Unas 40 mil dosis antitétanos fueron distribuidas en Beni, cuya geografía agro-ganadera está seriamente afectada por las aguas.
El temible dengue irrumpió también en las zonas siniestradas con un total de 634 casos en Beni y Santa Cruz, otra región del oriente boliviano aquejada por las aguas.
Las autoridades sanitarias detectaron también cuatro personas afectadas de fiebre amarilla, de las cuales tres fallecieron el fin de semana. A este cuadro se sumaron otros tres casos de hantavirus y 32 de leptospirosis.
Las cuadrillas médicas bolivianas fueron reforzadas por brigadas de cooperantes de Venezuela y Cuba.
Los habitantes ribereños del departamento de Pando, en el extremo norte boliviano, frontera con Brasil y Perú, comenzaron también a padecer los rigores del mal tiempo que agitó las aguas de los ríos Tahuamanu, Madre de Dios, Orthon y Beni, afluentes de corrientes provenientes de Perú.
Según versiones de la oficina de Defensa Civil unas seis localidades de Pando fueron anegadas por la crecida de los ríos y unas 70 familias evacuadas a albergues temporales.
Mientras las inundaciones comenzaban a amainar en la región norte, este y noreste, los cuadros de enfermedades configuraban una segunda fase de "emergencia especialmente grave", dijo la ministra Heredia.
La conjunción de lodo, basura y putrefacción de animales muertos "crea un cuadro de patologías que debemos controlar", especialmente con la ayuda internacional que comenzó a fluir al país, según Heredia.
Las brigadas médicas de Cuba atendieron a más de 73 mil familias, mientras Venezuela donó material quirúrgico y cinco tonelades de insumos médicos, según reportó el diario El Deber, citando informes oficiales.
A la solidaridad internacional, traducida en remesas de vituallas y medicinas de España, Francia, Estados Unidos, Argentina, Venezuela, Perú, Brasil y Chile, se sumó este lunes el envío de 40 tonelades de donativos provenientes de México, a bordo de tres aeronaves Hércules.
El envío tiene la particular importancia de que contiene equipos para potabilizar el agua, así como vacunas contra el dengue, la malaria y la hepatitis, puestos móviles de socorro para atender a unas dos mil personas y químicos para desinfectar los lugares anegados.
Los desajustes climáticos -que combinan lluvias en el oriente y feroces sequías en el occidente- afectaron a más de 77 mil familias bolivianas y se cobraron la vida de 42 personas, según datos oficiales.
La zona más afectada por el fenómeno de El Niño, que calienta las aguas del Pacífico por encima de sus niveles normales, es Beni (este) con casi 18 mil familias que perdieron todas sus pertenencias, sus campos de labranza y ganado.
© 2007 AFP