Dallas (EEUU), 12 mar (EFE).- Los padres de una niña hispana de 17 meses que murió el año pasado tras recibir un trasplante de hígado con un tipo de sangre incompatible demandaron a dos centros médicos de Dallas (Texas) y a tres cirujanos que participaron en la operación, se informó oficialmente hoy.
La demanda señaló que en julio del año pasado los médicos del Centro Médico Infantil de Dallas equivocadamente realizaron un trasplante parcial de hígado de su padre en vez de su madre. La mujer y la niña tenían tipo de sangre O y la del padre era tipo A.
Este tipo de trasplante se ha generalizado debido a que el hígado es uno de los pocos órganos del cuerpo humano que puede regenerar sus tejidos tanto en el receptor como en el donante.
Los detalles de la demanda presentada el lunes y que sólo se dieron a conocer hoy indicaron además que los cirujanos cortaron venas y arterias del hígado de la niña, identificada como Jeanella Aranda, provocando hemorragias que no pudieron controlar.
Fuentes judiciales indicaron que el laboratorio externo que realizó la clasificación sanguínea de Jeanella y de sus padres mezcló los tipos de sangre e identificó al padre como donante compatible para un trasplante parcial de hígado.
Después de la operación Jeanella comenzó a sufrir problemas sanguíneos, fiebre, problemas hepáticos y hemorragias.
La incompatibilidad sanguínea sólo fue descubierta 19 días después de la operación y cuando la madre advirtió la diferencia en los tipos de sangre. La niña murió al día siguiente.
El Centro Médico Infantil emitió hoy una declaración en la que señaló que "se realiza una intensa investigación sobre la atención recibida por Jeanella en nuestro hospital y cree haber actuado adecuadamente en base a la información recibida del laboratorio externo".
Los padres de Jeanella, César y Alicia Aranda, también demandaron al Centro Médico de la Universidad Baylor, donde los cirujanos extirparon parte del hígado del padre y lo enviaron al Centro Médico.
El caso de Jeanella se sumó al de la muerte de la muchacha mexicana Jesica Santillán, de 17 años, que murió en Carolina del Norte el mes pasado tras someterse a dos trasplantes de corazón y pulmón, el primero de ellos con un tipo de sangre incompatible.
Hasta el momento los padres de Jesica no han anunciado si presentarán una demanda contra el Centro Médico de la Universidad de Duke, donde se llevó a cabo la operación. EFE
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