
Que Courtney Love esté en problemas ya no es noticia, lo que se vuelve carne fresca ahora es saber en que otro lío se ha metido la cantante a la que Kurt Cobain dejó viuda, sola, triste y abandonada.
Love, que por explosiva lo menos que hace es honor a su “apellido”, va como el cangrejo: para atrás. El fin de semana pasado comenzó para ella con el pie izquierdo y terminó color de rosa, pues fue ingresada en un hospital.
Como si fuera una crónica de un mal fin de semana anunciado: el viernes no se presentó a una comparecencia judicial en un tribunal de Los Ángeles, donde debía responder a los cargos que en abril pasado le hicieron tras golpear a una mujer con una botella de alcohol.
Según la agencia EFE, el abogado de la cantante, Michael Rosenstein, dijo que su cliente se encontraba en Nueva York y estaba confusa sobre si su presencia era requerida en esta vista.
El encargado del caso, Dennis E. Mulcahy, no aceptó la excusa y determinó que la que fuera líder del grupo Hole violó su fianza de $55.000, antes de fijar una cantidad superior de $150.000.
Como si la disposición de la corte no calificara ya como mala noticia, al día siguiente, el sábado 10 de julio, corrió la “nueva” de que la intérprete de Americans Sweetheart había sido hospitalizada.
¿Qué le duele?
Agencias de prensa informaron que Courtney fue ingresada en el hospital Bellevue de Manhattan, en Nueva York, por problemas ginecológicos.
De nuevo, la información la dio a los medios internacionales el propio abogado de la cantante, Michael Rosenstein, quien lo primero que hizo fue aclarar que el ingreso de la artista en el hospital no se relacionaba con drogas.
Conocido es que Courtney Love ya se había declarado culpable de los cargos de drogadicción ante un tribunal de Nueva York.
Lo que los medios internacionales todavía no han informado es qué pasara con el proceso legal en el que Love se encuentra enredada desde hace semanas.
Los líos con la corte, su declaratoria de bancarrota, el que se le retirara la custodia de su hija, y una promoción nada alentadora de su disco solista, Americans Sweetheart , nubla el presente de la viuda del que fuera líder de Nirvana, pero ella aseguró a la revista Rolling Stone que no suicidará, como lo hizo Cobain hace ya varios años.