San Ramón. El cierre del paso a Puntarenas por los trabajos en el kilómetro 99 (a unos 11 kilómetros de Esparza, yendo hacia San Ramón) realizados ayer no causó más inconvenientes que la disminución en las ventas de algunos negocios ubicados en esa ruta y las largas esperas en las paradas de autobuses hacia las comunidades del cantón ramonense.
Aunque los trabajos de reparación de la alcantarilla y la calzada avanzaban afanosamente, para las 2 de la tarde aún quedaba mucho por hacer, según se pudo constatar en el recorrido que efectuó un equipo de La Nación.
Uno de los constructores, quien pidió reserva de su nombre, expresó: "Hemos trabajado sin parar; si las condiciones del tiempo lo permiten, pensamos que sí lo vamos a lograr." El sábado, en un boletín de prensa difundido por el MOPT, se afirmaba que el cierre del paso sería hasta las 8 de la noche del domingo.
A pesar de que la cantidad de vehículos era mayor por las rutas alternas (Atenas-San Mateo-Esparza o Caldera) a las 3 de la tarde el tráfico avanzaba en forma fluida en los Montes del Aguacate.
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