El celtino, mezcla de música celta y latina, es la última moda musical en Canadá y está pegando con fuerza, según los datos de las ventas de discos.
El guitarrista chileno Óscar López y el cantante James Keelaghan, que forman el dúo Compadres, son los creadores del nuevo ritmo, al que ellos mismos han bautizado con el nombre de celtino, formado por las primeras letras de la palabra "celta" y las últimas de la palabra "latino".
Aunque la combinación de ambas músicas, al menos aparentemente, parece que difícilmente puede dar un buen resultado, López y Keelaghan han logrado que su descubrimiento musical sea todo un éxito.
Del primer disco de Compadres, al que han titulado de la mismas forma, ya se han vendido más de 10.000 ejemplares desde el pasado julio, mes en que salió al mercado.
El disco contiene emotivas baladas folk, apasionados temas instrumentales de guitarra española y otras canciones que son una combinación de ambos estilos.
El éxito discográfico de Compadres se ve acompañado por el interés que despiertan sus conciertos en la gira que actualmente realiza el dúo por 14 ciudades de Canadá.
Las entradas para ver a Compadres se han agotado en varias de las salas en donde han actuado recientemente.
Óscar López, de 44 años de edad, y que emigró desde Chile a Canadá hace 18 años, reside en la ciudad de Calgary (oeste canadiense) y conoció a Keelaghan, de 39 años y residente en Toronto (este), en 1992 durante un circuito de festivales folk.
Ambos actuaban habitualmente solos, pero tras acompañarse musicalmente en varias ocasiones, los dos músicos coincidieron en pensar que la mezcla de sus dos estilos poseía un gran potencial.
"Fue como si, eh, ¿por qué no hacemos una mezcla?", explicó James Keelaghan, ganador de un premio Juno en 1994.
"Es increíble lo bien que funciona. Es realmente algo natural y muy biológico", añadió López.