Damasco, 5 jun (EFE).- El partido árabe socialista "Baaz", en el poder en Siria desde hace más de cuarenta años, celebrará mañana un congreso que ha sido calificado de crucial para este país acusado por EEUU de terrorismo y acosado por la crisis económica.
Tanto la población local como los expertos internacionales esperan que la reunión sirva para acelerar el programa de reformas y hallar un mecanismo que saque a Siria del aislamiento y la parálisis en la que sobrevive.
La décima conferencia nacional del "Baaz" sirio arrancara con un discurso del presidente del país, Bachar al-Asad, que según los analistas locales marcará las pautas sobre la que se desarrollarán las discusiones políticas y económicas durante los cuatro días siguientes
Más de 1.200 delegados, un tercio de los cuales son oficiales del Ejército, participarán en las mismas, que también abordaran la problemática de la reforma interna de un partido anquilosado y aún dominado por la vieja guardia que flanqueó al fallecido presidente Hafez al-Asad.
Papel destacado desempeñarán los miembros del denominado Frente Nacional de Progreso, un coalición aperturista salida del propio partido gobernante.
Según fuentes del partido, la ponencia sobre reforma política será obra del ministro sirio de Asuntos Exteriores, Faruk al-Shara, y acarreará polémica, ya que se esperan cambios radicales en cuestiones como Irak y el Líbano.
La exposición sobre economía correrá a cargo del Ministro de Finanzas, Mohamed al-Husein, y se espera que sirva para relanzar y dar más espacio legal a los cambios introducidos por Bachar al-Asad en sus cinco años de Gobierno.
"Los sirios esperamos que la conferencia nos traiga más reformas, pero parece que el verdadero cambio necesitará aún tiempo para que pueda cristalizar", aseguró el analista político, Sami Mubayyed.
"Las autoridades no quieren que se perciba que el partido está debilitado. Lo único que pretenden es decir: aún estamos aquí y no queremos irnos", criticó. EFE
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