San José (Redacción). U n público muy efusivo recibió con aplausos y gritos a Oliviero Toscani, quien ha dejado su huella fotográfica en campañas publicitarias para compañías como Esprit, Chanel, Fiorucci, Prenatal y muchas otras. Ha colaborado en publicaciones internacionales de moda para revistas como Elle, Vogue, CQ, Harper’s Bazaar y Esquire.
Cuando el "padre" de Fabrica, el centro internacional para la investigación de las artes y la comunicación de Benetton, dijo que intentaría hablar español y que tenía 71 años, la misma edad que Mick Jagger, los cerca de 200 asistentes de la Antigua Aduana gritaron aun más y se carcajearon.
El artista comenzó a repasar su trabajo fotográfico desde 1965 hasta hoy y afirmó que "soy completamente libre y me gusta mucho mi trabajo".
"Soy el hombre mas privilegiado que he conocido; hay que ser sincero y reconocer esta condición", bromeó.
Claudia Schiffer, Monica Belucci, y Sofía Loren fueron algunas de las bellezas femeninas que posaron para su lente y asegura que le gustan las mujeres" rubias, bajitas, veteranas..."
Desfilaron también en sus imágenes hombres destacados del siglo XX como Federico Fellini, Andy Warhol y Roman Polanski.
Toscani opina que la fotografía exige soñar e imaginar, dos conceptos que considera básicos para la vida.
En cuanto a su forma de trabajar, el fotógrafo afirma que todos los detalles son importantes a la hora de capturar una imagen.
"No me interesa tomar fotos de la naturaleza, pues es perfecta. Me gustan las imágenes de seres humanos reales e imperfectos".
Dijo que no le gusta trabajar con agencias publicitarias pues se privilegia el mercadeo y hasta dio un consejo.
"No hay arte sin provocación, cuando les pidan hacer algo desde el mercadeo, hagan lo contrario, aléjense de esa mentalidad del mercadeo".
Toscani asegura que no le gusta participar en exposiciones exclusivamente estéticas.
"Una fotografía no es solo una obra de arte, tiene una función en la sociedad. Las fotos son testimonios de nuestro tiempo: hay belleza y tragedia".
El italiano nacido en Milán en 1942 aderezó su exposición de comentarios sarcásticos . "La caca es la única cosa que hacemos sin copiarnos unos a otros. Es única", dijo, refiriéndose a un libro de fotografías sobre excrementos humanos.
Además de fotografías de modas y retratos de personajes, en las obras de Olivieri destacan temas como discriminación, destrucción ambiental, guerras, violencia social e injusticia.
El fotógrafo narró una anécdota de una aventura" políticamente incorrecta " que se jugó para crear una fotografía de un condón gigante en París como parte de una campaña de prevención del SIDA.
Recientemente está trabajando en una serie de retratos para "mostrar "el alma de varios seres humanos alrededor del mundo.
"Se trata de anular el virtuosismo estético.Ninguna persona es fea, cada uno es único e irrepetible"
Toscani cerró con broche de oro la segunda jornada del Festival Internacional de Diseño FID 2013 que continúa mañana.