Desde muy adentro, de allí donde se refugia el alma y la pasión, Mahé Marty Maletá saca las obras que ha aprendido y deja que el público o sus alumnos las escuchen en la voz afinada de su clarinete.
Para esta cubana, la música no fue una fuerza arrebatadora que la sorprendió, sino un amor profundo que creció poco a poco y se oye vibrar en sus participaciones como miembro de dos orquestas: la Sinfónica Nacional de Cuba y la Sinfónica de la Ópera y el Ballet de Cuba, como especialista que imparte clases magistrales en diferentes partes del mundo y hasta en sus prácticas.
Ayer, ella ofreció un concierto en la Escuela de Artes Musicales y durante esta semana ha impartido clases maestras en la Universidad de Costa Rica y en el Instituto Nacional de Música.
"Encontré un buen nivel artístico. La cuestión técnica va bien encaminada, porque hay buenas bases. Por supuesto, hay detalles qué corregir, pero son corregibles", dijo la clarinetista de 27 años al preguntarle acerca de la calidad de los alumnos ticos.
Mahé reconoce que en Cuba la música costarricense y sus intérpretes son desconocidos, a pesar de que esa isla es un gran imán musical para importantes orquestas, directores y agrupaciones de cámara.
"A través de los festivales que se realizan han llegado grandes figuras, que imparten clases y nos enriquecen a los músicos cubanos", agregó.
A esta joven la pasión por el clarinete, el cual escogió desde los 10 años después de estudiar violín durante tres, le deja poco tiempo para estudiar, pero ahora está empeñada en seguir una maestría.
"Un músico nunca debe estar satisfecho con lo que hace. Uno necesita aprender más y constantemente. Existen tantas obras de grandes que me faltan por tocar", afirmó esta ganadora, en dos ocasiones, del primer premio del Concurso Nacional de Música Amadeo Roldán en Cuba.
En pleno crecimiento
Mahé Marty Maletá es graduada del Instituto Superior de Arte de La Habana, estudió gracias a una beca en Suiza y hasta realizó una residencia artística en el Centro Civitella Ranieri de Umbría en Italia.
Además, impartió clases en la Universidad de Antioquía (Colombia) y ha ofrecido recitales en Cuba, Colombia y Suiza.
Actualmente, es integrante de esas dos prestigiosas orquestas. Formó parte de un quinteto de clarinetes, pero sus obligaciones no le permitieron continuar con él.
Es amante de Brahms. "Sus obras me atrapan de una forma increíble. Pero también me gustan muchos otros compositores, siempre hay mucha música por conocer", expresó.
En su familia apenas le notaron la vocación por la música la inscribieron en un conservatorio. No obstante, admite que su verdadera vocación la adquirió poco a poco entre más conocía las posibilidades de su clarinete y oía tocar a sus maestros.
Ahora, esta joven no descarta volver a Costa Rica para dar otras clases magistrales, pero por ahora no hay una nueva invitación. De lo que está segura es que seguirá tras sus sueños de interpretar música cada vez mejor.
Mahé Marty Maletá es integrante de la Orquesta Sinfónica Nacional de Cuba y de la Orquesta de la Ópera y el Ballet de Cuba.