El arquitecto español Enric Miralles, uno de los profesionales en este campo con mayor proyección internacional, falleció el lunes a los 45 años en Barcelona, su ciudad natal, a consecuencia de un derrame cerebral.
Miralles fue operado en marzo en Houston (Estados Unidos) de un cáncer y fue enterrado ayer en el cementerio de la localidad de Igualada (noreste de España), que él mismo había diseñado hace 15 años, informaron a EFE fuentes del Colegio de Arquitectos de Barcelona.
El despegue internacional de Miralles tuvo lugar en la década del 90, especialmente al ganar, en 1998, el concurso internacional para la construcción del nuevo Parlamento de Escocia (Reino Unido), proyecto en el que trabajaba actualmente.
En 1999 ganó también el concurso para la ampliación de la nueva sede del Instituto Universitario de Arquitectura en Venecia (Italia).
Licenciado por la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Barcelona (ETSAB) en 1978, Miralles montó un estudio con Carmen Pinós en 1983, que construyó un cementerio en Igualada en 1985, merecedor de un premio FAD (Fomento de las Artes Decorativas).
Recientemente, se había asociado a su segunda mujer, la italiana Benedetta Tagliabue, que precisamente recibió el pasado 21 de junio en su nombre un premio FAD de interiorismo por la rehabilitación de una casa en La Clota, en Barcelona.
No menos importante había sido su labor docente, ya que en 1989 fue profesor visitante de la Universidad Columbia de EEUU, en la que había sido alumno en 1980, así como en el Kingston Polytechnic de Londres y de la Tulane University en Nueva Orleans (EE. UU.).
Asimismo, había dado conferencias en diversas instituciones de todo el mundo, incluidas la Universidad de Harvard y la Architectural Association en Londres.
Miralles fue Premio Nacional de Arquitectura de España en 1995 por la construcción de una escuela-hogar.