El Cairo, 16 feb (EFE).- Los ministros de Asuntos Exteriores de la Liga Arabe concluyeron hoy su reunión extraordinaria en El Cairo sin llegar a un acuerdo sobre la fecha para celebrar una Cumbre urgente de la organización.
"No hay acuerdo para la fecha de una Cumbre, pero se seguirá con las consultas y los ministros se volverán a reunir para discutir si se hace un encuentro especial sobre Irak", explicó a los periodistas el secretario general de la Liga, Amro Musa.
El máximo responsable de la organización panárabe justificó la falta de acuerdo por lo apretado de la agenda internacional y dijo "ya que de aquí a final de febrero hay reuniones (internacionales) en las que también hay intereses árabes".
El presidente de Egipto, Hosni Mubarak, instó el viernes a los otros 21 mandatarios de la Liga Arabe a celebrar el próximo sábado una Cumbre extraordinaria para tratar la crisis iraquí.
La fecha para la convocatoria de la Cumbre había sido objeto de polémica a lo largo de todo el día, después de que el diario oficial egipcio "Al Ahram" informara en su edición de hoy que se tendría lugar el 27 de febrero en Sharm Sheij, y después se rumoreara una propuesta para el 1 de marzo.
Fuentes de la Liga Arabe filtraron, sin embargo, que la falta de acuerdo se debía a que no existía consenso en la agenda de la reunión y sobre todo en el mensaje que los árabes darían.
Durante todo el día se debatió una propuesta de Siria, que no fue aceptada por algunos países ya que el Gobierno de Damasco es partidario de que la Cumbre sirva para enviar una dura advertencia a Estados Unidos por su amenaza de atacar Irak.
En la rueda de prensa posterior a la reunión, el ministro libanés de Asuntos Exteriores, Mahmud Hamud, presidente rotativo del Consejo Ministerial, indicó que miembros de la Liga estaban de acuerdo en su oposición a "un ataque a Irak o contra cualquier otro país árabe".
"Los árabes queremos la paz y no deseamos la guerra. Instamos a EEUU y el Reino Unido a hacer todos los esfuerzos posibles para evitar el conflicto bélico" en Irak, explicó Mahmud.
Poco antes de acabar la reunión ministerial, la Liga Arabe había divulgado un comunicado con ocho puntos sobre el que los miembros discutían en relación a la crisis iraquí.
En el mismo se estudiaba la posibilidad de que los árabes acordaran "rechazar ofrecer cualquier tipo de ayuda" a un ataque a Irak.
La propuesta, de la que EFE obtuvo una copia, subrayaba que "ningún país (de la Liga) prestará asistencia o facilitará una acción militar contra Irak desde la región", y que "un ataque a Irak lo sería también al resto de los Estados árabes".
En el documento se atribuía, además, "solo a Naciones Unidas la responsabilidad de resolver" la crisis, se destacaba "la cooperación de Irak con los inspectores de armas de la ONU" y se exigía que esos expertos "tengan más tiempo" para cumplir su misión.
Según fuentes cercanas al encuentro, la propuesta fue impulsada por países como Siria, que llegó a vincular su aprobación con la celebración de la posterior conferencia presidencial.
"Si hay cumbre tiene que ser para decir no a la guerra. Una cumbre sin ese mensaje sería desastrosa para la nación árabe", afirmaron fuentes de la delegación de Damasco.
A la postura ese grupo de países se oponen Kuwait, Arabia Saudí y los demás Estados del Golfo que son firmes aliados de Washington y que tienen en su suelo o embarcados en sus aguas territoriales a más de 150.000 soldados de EEUU preparados para atacar e invadir Irak. EFE
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