
La Habana (AP). Alberto, la primera tormenta tropical de la temporada, ocasionó la evacuación de más de 25.000 personas en el occidente de Cuba, a donde los aguaceros acumularon hasta 445 milímetros en pocas horas.
La intensidad de las lluvias ha disminuido, aunque en algunas localidades de Pinar del Río pueden ser fuertes, así como en las provincias habaneras y la Isla de la Juventud, indicó un boletín del lunes del Instituto de Meteorología isleño.
Formada el pasado fin de semana como depresión tropical y posteriormente convertida en Tormenta, Alberto se desplaza hacia la Florida, en Estados Unidos.
Aunque su centro no tocó tierra por Cuba, sus bandas de alimentación se hicieron sentir mediante los vientos y aguaceros.
Por la mañana los especialistas cubanos determinaron que Alberto se encontraba a unos 533 kilómetros hacia el noreste del Cabo de San Antonio, el extremo occidental de la isla y a una distancia similar de Cayo Hueso, en la Florida.
Un reporte del periódico oficial Granma informó sobre la evacuación de unos 25.400 pobladores en la provincia de Pinar del Río, quienes habitaban zonas inundables.
Paralelamente, se indicó que hubo problemas en el abasto de agua potable a la población y en el suministro de energía eléctrica, elemento que muchos hogares también usan para cocinar alimentos. Postes de luz y árboles fueron derribados.
En varios puntos del territorio los ríos se desbordaron y se suspendieron las comunicaciones, agregó Granma.
Paralelamente se señaló que algunos cultivos estaban anegados, pero no se ofreció un balance de pérdidas materiales.
El tabaco, la más valiosa de las produccionesta temporada las hojas se encuentran en procesos de curación bajo techo, manifestó el periódico.
Las lluvias en cambio fueron beneficiosas para surtir los embalses con unos 216 millones de metros cúbicos, alcanzando un nivel de llenado del 73%.
Particularmente positivo se consideró la recarga de las presas tras años de una pertinaz sequía, que el año pasado ocasionó tantos costos como los huracanes.
Según cifras oficiales, en 2005 los cubanos tuvieron pérdidas por secases de lluvias de unos 1.000 millones de dólares y más de 2.000 millones de unidades verdes debido al paso de los ciclones.