Tras haber visitado Chicago, Miami y Los Ángeles en varias ocasiones con Aiguardent , Carrasco presentó en Nueva York su propuesta de espectáculo de movimiento, sin texto, que fue muy aplaudido por quienes llenaron el teatro La MaMa, del East Village.
Ante más de un centenar de personas, la catalana interpretó su peculiar visión de la danza “que huye de etiquetas, aunque se podría encuadrar como teatro visual, de gesto o del objeto”, según explicó .
El espectáculo, cargado de fuerza interpretativa, representa la historia de Violeta , una mujer alcohólica que lucha, entre risas y llantos, por cambiar su vida o dirigirse hacia la muerte. Para Carrasco, “uno de los aciertos del espectáculo es que toca muy directamente a la gente; es un derechazo al estómago del espectador, quien, por una razón u otra, ve el tema del alcoholismo como algo cercano”.
Carrasco debutó en Nueva York dentro del marco del TeatroStageFest, el primer festival de teatro latino en español. Desde 1995, Aiguardent ha recibido dos Premios Max de las Artes Escénicas, equivalentes españoles a los premios Tony estadounidenses.