La Valeta, 9 mar (EFE).- Malta ratificó hoy su adhesión a la Unión Europea (UE) por un estrecho margen de en torno al 53 por ciento, según los resultados provisionales del referéndum consultivo celebrado ayer en este pequeño país insular del Mediterráneo
La consulta registró un índice de participación superior al 90 por ciento de los cerca de 300.000 malteses con derecho al voto y es la primera de las diez convocadas para este año en los países candidatos a la ampliación de la UE en 2004.
Las proyecciones difundidos por la televisión pública maltesa (Public Broadcasting System, PBS), aceptadas por los dos principales partidos, apuntan la victoria del "sí" con un 52,7 por ciento, frente al 44,7 de votos contrarios y un 2,4 de nulos.
Los seguidores del Partido Nacionalista del primer ministro Edward Fenech Adami celebraron el triunfo con concentraciones en las principales ciudades del país, en las que ondearon banderas de Malta y de la UE.
Fenech Adami, que concluyó las negociaciones con Bruselas para la incorporación de Malta a la Europa comunitaria, mostró su satisfacción y su esperanza en el inicio de una época de mayor prosperidad.
También salieron a la calle los laboristas de Alfred Sant, en la oposición, para festejar a su manera lo que consideran una victoria, ya que se atribuyen la suma de votos negativos y la abstención, las dos opciones que defendieron durante la campaña.
Sant, partidario de mantener el estatus de neutralidad que había convertido a Malta en la "suiza del Mediterráneo" señaló que "la mayoría de malteses no optó por la adhesión, aunque lo hicieran más de la mitad de los que depositaron su voto", atribuyéndose la abstención.
De hecho, él mismo se abstuvo ayer el referéndum y acudió al colegio electoral exclusivamente para votar en las elecciones locales de Birkirkara, la ciudad mas poblada de del país, que se celebraban paralelamente.
El líder laborista instó al primer ministro a que convoque inmediatas elecciones generales, en las que en caso de victoria no renuncia a promover otra consulta y a que pueda ser vinculante.
El plebiscito maltés es el primero de los que celebran este año los diez estados candidatos a integrarse en la Europa de los Quince el 1 de mayo de 2004.
A la consulta de hoy le seguirán las convocadas en Eslovenia (el próximo día 23), Lituania, Polonia, Hungría, Chequia, Chipre, Eslovaquia, Estonia y Letonia.
El Tratado de Adhesión de los diez países, que se firmará el 16 de abril en Atenas, incluye diversos acuerdos específicos para cada Estado, y en el caso de Malta la limitación a los ciudadanos europeos a adquirir más de una propiedad inmobiliaria en sus islas.
De carácter permanente, la restricción impedirá a los nacionales de los demás estados miembros la compra de segundas residencias, no afectará a quienes hayan vivido al menos cinco años en el país, ni a la adquisición de inmuebles ligados a actividades empresariales.
Esta excepción al libre mercado europeo se deriva de las especiales características de Malta, que sólo tiene 316 kilómetros cuadrados de superficie y es el tercer país con mayor densidad de población del mundo, tras Singapur y Mónaco.
Las negociaciones para la adhesión determinaron también que, durante el trienio 2004-2006, Malta perciba de la Unión unos 272 millones de euros y contribuya con unos 178 millones de euros.
De hecho, el saldo favorable de unos 195 millones de euros ha sido uno de los argumentos constantemente aludido por los partidarios del "sí" en la campaña previa al plebiscito.
Los laboristas abogaban por negociar con la UE un estatus de país asociado y esgrimían como ejemplo las ventajas obtenidas por Islandia, Noruega, Liechtenstein o Suiza.
Sin embargo, los nacionalistas consideran que la "asociación" a la UE es una opción únicamente idónea para países que quisieran pero no podrían adherirse por su situación geográfica, como es el caso de Libia, Marruecos, Túnez y Argelia.
Paralelamente al referéndum, ayer se celebraron también elecciones locales en 23 de los 68 municipios de Malta, con un participación récord del 88 por ciento. EFE
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