Ella captó en negativo a la figura más positiva de la realeza de Londres. Jayne Fincher ha sido por más de dos décadas la fotógrafa oficial de la Casa Real Británica y para el primer aniversario de muerte de la princesa de Gales -el próximo 31 de agosto- ha publicado un volumen con imágenes inéditas de la opulenta y abigarrada vida pública de Lady Di.
"Diana no era tan angelical como la mayoría de sus admiradores parecen creer", escribe la reportera gráfica en el prefacio del grueso tomo.
El libro ha sido titulado Diana, retrato de una princesa y, además de las fotografías, reúne testimonios en los que Fincher describe la evolución íntima de la muchacha Spencer.
"En ocasiones podía ser extremadamente difícil trabajar con ella", explica la fotógrafa, quien cuenta cómo su oficio de lentes y flashes la obligaba a soportar horarios trepidantes, viajes y recepciones.
Fincher relata cómo trabajó con un equipo inseparable: cámaras, computadoras y una escalerilla de aluminio, que llevaba a todas partes para poder elevarse entre la multitud que siempre rodeaba a la princesa.
La mujer que capturó...
En los aeropuertos la gente la miraba con extrañeza mientras ella cargaba plácidamente su escalera. "(...) sospecho que me tomaban por una limpiadora de ventanas ambulante", escribe.
Fincher se convirtió en amiga de Lady Di -a quien los fotógrafos conocían- con el apelativo de "Ojos azules". Junto a ella y Carlos visitó a reyes y reinas, líderes mundiales y celebridades.
"Cuando entraba en una habitación todos los hombres quedaban hipnotizados y todas las mujeres la envidiaban", amplía Fincher, quien estuvo a su sombra en su boda, en el nacimiento de sus hijos y en sus travesías por el mundo.
En ese afán por conseguir una buena imagen, la fotógrafa padeció el mal de altura en la meseta tibetana; se rompió una pierna por las pendientes de Suiza; desmayó de insolación en el Valle de los Reyes de Egipto y se alojó en un centro de lucha contra el cólera de un campamento de refugiados en Africa...
Las fotografías de este artículo fueron tomadas del libro, Diana, Retrato de una princesa, de la editorial Taschen.
Trébol de cuatro hojas
1 de julio de 1961
Nace Diana Frances Spencer, que en el futuro sería la Princesa de Gales.
29 de julio de 1981
Se casa con el Príncipe Carlos en la Catedral de San Pablo, seguida por millones de televidentes.
28 de febrero de 1996
Después que Carlos y Diana aceptaron sendas relaciones de infidelidad -él con Camilla Parker Bowles y ella con un jugador de rugby- terminan divorciándose.
31 de agosto de 1997
Diana murió en París por causa de una accidente automovilístico.
Retrato íntimo
A continuación algunas frases de la fotógrafa Jayne Fincher sobre Lady Di en su libro, Diana, retrato de una princesa:
"Los críticos dirían después que Carlos jamás amó realmente a su esposa, pero en las semanas que precedieron a la boda mi cámara no dejó de enfocar a la pareja y me convencieron de que estaban profundamente enamorados".
"(Desde 1981 se comenzaron a notar) los brotes de Di-manía, pues quedó bien claro que la multitud acudía a ver a la princesa y no a su marido".
"Y una mañana, cuando, al ir a pasar por debajo de un arco de poca altura, Carlos le advirtió: `Ten cuidado con la cabeza', Diana replicó con mordacidad: `¿Por qué? ¡Si la tengo vacía!'"
"Mientras la reina, su hermana y su hija solían llevar guantes para cumplir con su obligación de estrechar manos (de la gente en la calle), Diana casi nunca se los puso".