ROMA (AFP) La familia real italiana de los Saboya reclaman al Estado italiano 260 millones de euros con intereses como compensación moral por su exilio de 56 años, indicaron el martes medios de comunicación locales.
Víctor Manuel de Saboya, de 70 años, nieto de Víctor Manuel III, el último rey de Italia que reinó entre 1900 y 1946, reclama 170 millones de euros, mientras que su hijo Manuel Filiberto, de 35 años, pide 90 millones de euros, según algunas partes de una emisión televisiva cuya programación está prevista para el martes por la noche.
Los Saboya también reclaman la restitución de sus bienes, que fueron confiscados por el Estado italiano a raíz de su exilio forzado en 1946, según las mismas informaciones, que no precisaron ni la naturaleza de los bienes, ni su valor.
Los herederos varones de la familia real italiana fueron condenados al exilio en 1946 por la colaboración del rey Víctor Manuel III con el régimen fascista de Benito Mussolini. Pudieron regresar en 2002 a suelo italiano, a raíz de una ley que modificaba esta cláusula constitucional.
Carlo Malinconico, secretario general de la presidencia del consejo de ministros estimó que el gobierno italiano no solo no debe nada a la familia real italiana, sino que considera presentar una denuncia contra los Saboya por su responsabilidad en la instauración de leyes raciales durante la época del fascismo en Italia.
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