Miami (EEUU), 20 abr (EFE).- Un juez de Florida declaró hoy que Lionel Tate, un joven condenado a cadena perpetua cuando tenía doce años por el asesinato de una niña de seis, está capacitado mentalmente para afrontar un juicio que se le instruye por robo a mano armada.
Tate, de 19 años, que se encontraba en libertad condicional desde 2004 tras desestimar un tribunal el proceso en el que se le condenó a cadena perpetua en 2001, se declaró culpable en marzo de robo a mano armada a un repartidor de pizzas.
El joven de Florida podría afrontar por el robo una pena mínima de diez años de prisión o una máxima de 30 años, después de aceptar un acuerdo de culpabilidad presentado por la Fiscalía en 2004.
El juez estatal Joel T. Lazarus, magistrado del condado de Broward, al norte de Miami, indicó hoy que, tras escuchar el testimonio de tres psicólogos, "no había oído nada" que apuntase que Tate no está mentalmente capacitado para asumir el proceso judicial.
La defensa alegaba que su defendido podía estar aquejado de algún tipo de desorden mental debido a abusos sufridos en su infancia.
Donna Weiss, una psicóloga que examinó a Tate la semana pasada por orden del juez, concluyó que el joven muestra "la capacidad para comprender el ámbito y la naturaleza de las penas".
No obstante, Weiss explicó que Tate podría sufrir síndrome postraumático, a causa del abuso que supuestamente padeció a manos de su madre, una agente de la Patrulla de carreteras de Florida, hasta que cumplió los 12 años, según dijo él mismo a la psicóloga.
Asimismo, Tate pidió al juez que se le retirase su petición de culpabilidad con el argumento de que no comprendió las consecuencias del acuerdo que le permitía evitar la cadena perpetua por violación de la libertada condicional.
El magistrado fijó para el 18 de mayo la vista en la que determinará si le es retirado a Tate su acuerdo de culpabilidad sobre el robo al repartidor de pizzas, al tiempo que impondría la condena correspondiente.
En 1999, el joven atrajo la atención de los estadounidenses al convertirse en la persona más joven en ser condenada a cadena perpetua en este país por el asesinato de Tiffany Eunick, cuando, según Tate, jugaban a la lucha libre.
En el primer juicio, los abogados de Tate basaron su defensa en el hecho de que, según ellos, la muerte de la niña "fue accidental".
Tate, quien pesaba 77 kilos en ese momento, estaba emulando los espectáculos de lucha libre que se transmiten por televisión cuando lanzó a la niña contra el suelo y la pared y se dejó caer sobre ella, lo que produjo su muerte. EFE
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