EscucharRoma, 2 may (EFE).- El Gobierno italiano ha atribuido la muerte del agente Nicola Calipari a la "inexperiencia" y el "estrés" de la patrulla estadounidense que el pasado marzo abrió fuego contra su vehículo cerca del aeropuerto de Bagdad, en un informe que difiere en varios puntos con la versión ofrecida por el Pentágono.
Tras las investigaciones de una comisión ítalo-estadounidense para esclarecer el ataque, el equipo de Roma ha llegado a la conclusión de que es "verosímil" que el estado de tensión en el que se encontraban los militares norteamericanos les indujera a reacciones "instintivas y poco controladas".
Esta interpretación contrasta con la de Washington, que exculpa a su patrulla y asegura que en todo momento se atuvieron a las reglas militares, dado que, según afirman los propios soldados, el vehículo circulaba a gran velocidad y no se detuvo ante las señales de advertencia.
El informe italiano, sin embargo, se hace eco de las declaraciones del conductor para afirmar que el coche iba despacio, a no más de 50 kilómetros por hora, pero insiste en que "la cuestión no parece relevante, dado que no había señales de advertencia que impusieran una velocidad moderada".
También asegura que en la carretera por la que circulaban Calipari, un segundo agente italiano y la periodista Giuliana Sgrena, entonces recién liberada, no había señales que indicaran la presencia de un puesto de control de EEUU.
Precisa además que Estados Unidos conocía la presencia de los italianos en territorio iraquí, aunque no los detalles sobre su misión, que era la de gestionar la liberación de Sgrena, capturada un mes antes por un grupo armado en Bagdad.
En cualquier caso, el informe descarta que el ataque fuera premeditado y afirma que el soldado estadounidense que efectuó los disparos se sintió abrumado por la presencia del vehículo que se acercaba.
En este sentido, recoge las declaraciones del militar, que dijo que "se sintió amenazado por el acercamiento del coche, que pensó en sus hijas, y que estaba literalmente abrumado por una maniobra que debía efectuar en tiempo muy breve, teniendo en cuenta la escasa distancia a la que vio el vehículo".
Aunque los investigadores italianos viajaron al lugar donde estaba el puesto de control para comprobar lo sucedido, "la escena de los hechos no había sido preservada y no estaba tal y como se presentaba después del tiroteo", por lo que no se pudo verificar la posición de los militares, añade el informe.
La versión del Gobierno de Roma sobre lo sucedido se esperaba con gran expectación, después de que el pasado viernes Italia y EEUU reconocieran que mantenían divergencias sobre las circunstancias que rodearon la muerte de Calipari.
Ambos gobiernos señalaron entonces que compartían "deducciones y hechos", pero no las conclusiones finales, al tiempo que elogiaron el "heroísmo" del agente secreto italiano.
Pese a las discrepancias, ambos gobiernos han insistido en que su alianza es "sólida" y se basa en "una fuerte y solidaria amistad, con valores compartidos".
"Esos valores nos comprometen a permanecer al lado del pueblo iraquí, a petición del Gobierno soberano de Irak y en cumplimiento del mandato de las Naciones Unidas", señalaba Washington en una nota difundida el viernes.
Italia, que respaldó a EEUU en la invasión de Irak, mantiene desplegados cerca de 3.000 soldados en los alrededores de la ciudad meridional de Nasiriya desde mediados de 2003.
Está previsto que el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, comparezca ante la Cámara de Diputados el próximo jueves para dar cuenta de la postura de su Gobierno ante el caso Calipari. EFE
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