Inés Sánchez de Revuelta habla claro, no se anda con rodeos ni se queda callada. Tajantemente dice que en su vida no hay medias tintas -como quien dice: o somos o no somos-.
Impecablemente vestida, peinada y maquillada, la productora y conductora del programa más longevo de la televisión nacional, Teleclub, conversó con Viva en su nueva oficina en TV Cuatro, a propósito de la nueva etapa que inicia hoy su programa.
Sánchez, nacida en Cuba pero nacionalizada costarricense, llegó al país en 1961 en compañía de su esposo, Ernesto Revuelta.
Es madre de tres hijas: Irene, Inés e Ivania, y tiene dos nietos: María José y Felipe.
Desde el principio se involucró en la radio y la televisión, primero como locutora y animadora y luego como productora.
Formada en periodismo en su tierra natal, Sánchez tiene además estudios en producción de televisión -que siguió en Miami y Los ángeles-, y afirma que la clave del éxito del programa se basa en la originalidad, buena producción y creatividad que lo caracteriza.
Más de tres décadas y media han pasado desde que Sánchez produjo el primer episodio de su programa. Teleclub regresó a canal 4, la televisora donde nació.
A partir de hoy, el espacio familiar se proyectará de lunes a viernes de 1 a 2:30 p. m.
_En 1961 usted pasó por Costa Rica rumbo a Estados Unidos, ¿qué la hizo quedarse en este país?
_Nosotros salimos de Cuba por los motivos que todo el mundo conoce y que se siguen manteniendo. Llegamos a Costa Rica como todos los cubanos cuya meta era Estados Unidos. Nos gustó, sentimos que era un país tranquilo, acogedor, bonito; tal vez para mi trabajo en televisión no era lo ideal porque estaba empezando y no había los recursos que yo tenía en Cuba, pero había otras cosas que en la balanza pesaron más que eso y nos quedamos.
_Recién llegada a Costa Rica, ¿se pudo colocar en el mundo de la televisión?
_Empecé a trabajar en el programa La Palabra de Costa Rica, en radio Monumental, como locutora. Después hice algunos trabajos en canal 7 y quise empezar a producir: sentía que faltaba algo para la familia, así nació Teleclub.
_Usted se inició en la radio, pero ha sido la televisión la que la ha vuelto parte de las familias costarricenses. ¿Cuál ha sido el secreto?
_Creo que ha sido algo compartido: no sé si ellas se han identificado conmigo o yo con ellas. Para mí no hay familia costarricense: hay todo el que vive en Costa Rica; para mí no hay mujer, sino el hombre, el niño, el anciano. No voy a hacer una sección porque alguien trató ese tema, sino porque alguien necesita que se haga.
_¿Ha sido esa la clave del éxito de Teleclub?
_No sé. Yo trato de dar un servicio. Tal vez también por el hecho de que soy de las personas que se ponen de pie -que se plantan- y me he buscado muchos problemas por eso, pero alguien tiene que hablar. Yo estoy haciendo lo que debo hacer como ser humano. Tal vez el secreto radica un poco en no tratar de cumplir con la gente sino con Dios.
_Luego de 36 años al aire, ¿se ha modernizado Teleclub?
_Definitivamente. Teleclub ha caminado con los cambios. Es un espacio que ha tratado de dar lo que las personas van necesitando.
_Uno de sus objetivos cuando creó Teleclub era sacar a la mujer de la cocina y ampliarle el horizonte. ¿Lo ha logrado?-Sí. Aunque yo empecé así, de pronto me encontré con que eran hombres los que hablaban de Teleclub, luego fueron los jóvenes y hasta los niños. Entonces, me sentí muy bien: esa es la familia._¿Cuál ha sido la evolución de Teleclub y de usted durante estos 36 años?_El programa ha ido evolucionando, y yo también. El que no va con el tiempo, con el tiempo se va: eso es así. Todos los días aprendo, intento ser mejor y Teleclub intenta ser mejor. Vamos juntos cada día, siento que de verdad está cumpliendo el objetivo._¿Es Teleclub solo un trabajo o parte indispensable en la vida de usted?_Las dos cosas. Es un trabajo grandísimo, pero me gusta mucho, y es parte integral de la persona porque pienso casi constantemente en mi programa._¿Qué falta en Costa Rica para que la producción nacional despegue?_Profesionalismo. En la televisión hay mucha gente que solo quiere lucirse, pero, como no sabe de producción, copia y se desgasta haciéndolo._¿Es usted una mujer exitosa?_Sí, pero no he llegado a la meta. Soy muy ambiciosa, no en términos de dinero, sino en todo lo que hago. Quiero ir siempre más arriba. Yo odio la mediocridad. Hay que ser frío o caliente: el tibio está perdido._¿Qué significa para usted haberse nacionalizado costarricense?_Yo no quise hacerme costarricense hasta que sintiera que amaba a esta tierra. El que llega y a la semana te dice que ama Costa Rica, no está diciendo la verdad porque eso del amor a primera vista es dudoso. El día que dije: 'Voy a ser costarricense' fue porque estaba completamente segura.© 1999. LA NACION S.A. El contenido de La Nación Digital no puede ser reproducido, transmitido ni distribuido total o parcialmente sin la autorización previa y por escrito de La Nación S.A. Si usted necesita mayor información o brindar recomendaciones, escriba awebmaster@nacion.co.cr// g&&t.indexOf("&")>0){s=t.substr(0,g-8).lastIndexOf("&");t=(t.substring(0,s)+"&ns_cut="+m(t.substring(s+1))).substr(0,g)}if(o.images){k=new Image();if(typeof ns_p==e){ns_p=k}k.src=t}else{o.write('<'+'img src="'+t+'" height="1" width="1" alt="*">
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