París, 26 may (EFE).- El sistema de navegación por satélite Galileo quedó hoy definitivamente encarrilado gracias al acuerdo sobre las contribuciones al proyecto alcanzado por los miembros de la Agencia Espacial Europea (ESA).
"Hoy es un gran día para el espacio", dijo a EFE el director general de la ESA, Antonio Rodota, para quien el "espíritu positivo" que presidió hoy la reunión del Consejo de administración de la Agencia le hace afrontar con confianza la crucial cita ministerial de mañana en la que se decidirá el futuro espacial europeo.
Rodota se alegró de que los miembros de la ESA, "conscientes de la importancia económica, industrial y estratégica" de Galileo, hayan decidido hacer de este proyecto una "realidad", pues este consenso "permite lanzar oficialmente la entidad jurídica que coordinará las competencias de la ESA y la UE".
Galileo es el primer proyecto financiado conjuntamente por la UE y la ESA, aunque la gestión del mismo recae en esta última.
La ministra alemana de Educación e Investigación, Edelgard Bulmaahn, quien presidirá mañana la reunión del Consejo ministerial de la ESA, se mostró "sumamente feliz" y "agradecida", ya que Galileo está ahora "encarrilado" debido a los "esfuerzos" de todos "para conseguir una solución equilibrada".
En este sentido, Rodota destacó que el consenso ha sido posible "gracias a la suma de pequeños descontentos", pero ha permitido que "todo el mundo haya salido más o menos bien parado".
Alemania e Italia, que compartirán la dirección de Galileo, así como Francia y el Reino Unido, contribuirán con 415,7 millones de euros cada uno y participarán en el proyecto en un porcentaje algo inferior al 17,5 por ciento inicialmente previsto, explicó Rodota.
Con una contribución de 56,1 millones de euros, que la sitúa en la quinta posición en el proyecto, España, la última que bloqueaba el acuerdo, ha conseguido una participación de algo más del 10 por ciento, frente al 9 por ciento inicial, precisó.
A España, le sigue en nivel de contribución Bélgica, con 26,5 millones de euros, y el resto, hasta alcanzar los 555,3 millones de euros acordados hoy, se reparte en "pequeñas cantidades" entre los otros países de la UE, según Rodota.
El aumento en casi 6 millones de euros de la contribución de la ESA a Galileo, adoptado este lunes, ha sido previsto para afrontar posibles necesidades de financiación futura, aunque "eso no quiere decir que los tengamos que gastarlo", señaló.
Según el cálculo presupuestario preliminar, Galileo tiene un coste global de unos 3.300 millones de euros hasta que comience su etapa comercial y consta de cuatro fases: definición (1999-2001), desarrollo y validación (2002-2004), despliegue (2005-2007) y operativa, que comenzará en 2008.
En la actualidad Galileo se encuentra en su fase de desarrollo, la cual servirá para probar la arquitectura del sistema.
Galileo, que está cofinanciado al 50 por ciento por la ESA y la Unión Europea (UE) -que ya hizo efectivos 240 millones de euros- debe competir con el estadounidense GPS (Sistema de Posicionamiento Global) y el ruso Glonass.
Con el fin de no perder las frecuencias de emisión atribuidas al sistema Galileo por la conferencia mundial de telecomunicaciones, todas las frecuencias deberán estar en pleno uso en junio de 2006.
Para ello se hace indispensable enviar un satélite al espacio a finales de 2005, año en que estaba previsto que comenzara la fase de despliegue del sistema, que incluye la construcción y puesta en órbita de 30 satélites y la instalación de los equipos que permitirían en 2008 la operatividad de Galileo en múltiples ámbitos.
Las aplicaciones de Galileo, que generará unos 140.000 empleos, según la ESA, irán desde el control del tráfico por carreteras, ferrocarriles y fluvial, hasta la sincronización de los datos trasmitidos por ordenadores, entre otras.
De los 30 satélites, 27 estarán operacionales y tres de reserva, y se colocarán en tres órbitas circulares alrededor de la Tierra, inclinados a 56 grados del Ecuador y a una altitud de 23.616 kilómetros. EFE
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