EscucharNaciones Unidas, 8 sep (EFE).- Francia divulgó hoy un proyecto de resolución en el Consejo de Seguridad para autorizar el envío con carácter de urgencia de dos batallones más para la Misión de la ONU en la República Democrática del Congo (MONUC).
La propuesta francesa se presentó después de que el secretario general de la ONU, Kofi Annan, enviara una carta al presidente del Consejo de Seguridad, el embajador español Juan Antonio Yáñez-Barnuevo.
En la misiva, Annan expresó su preocupación por la "volátil situación de seguridad" en el país africano y advirtió, a la vista del desarrollo de los acontecimientos, de la posibilidad que ésta se deteriore aún más y se vuelva incontrolable.
Asimismo, solicitó al Consejo que tome una decisión urgente para desplegar refuerzos de emergencia, dos batallones de infantería y cuatro helicópteros de artillería, para la operación de paz de la ONU.
En su último informe, Annan recomendó un aumento de los efectivos militares de la MONUC, pero la ampliación que sugería, y que se debatirá en otra resolución del Consejo de Seguridad, es mucho mayor.
Aconsejó ampliar la operación de paz en el Congo, una de las más costosas que tiene la ONU y que tiene 10.596 efectivos militares, junto con 702 miembros del personal civil internacional y 1.405 civiles locales.
El proyecto de resolución no menciona el número de tropas adicionales, pero inicialmente se barajaba la cifra de entre 300 y 400 "cascos azules" más, que se destinarían a áreas donde ha aumentado la conflictividad, como son las provincias del norte y el sur de Kivu, así como en el distrito de Ituri.
Fuentes diplomáticas señalaron hoy que está cifra podría ser más elevada y que si se autoriza este reforzamiento de emergencia, podrían enviarse entre 1.600 y 1.700 soldados, que posiblemente procederían de Pakistán e India.
El embajador francés, Jean Marc de la Sabliere, dijo que espera que la resolución se adopte esta semana y subrayó que existe un "apoyo real" de todos los países del Consejo de Seguridad para ampliar las tropas de la MONUC con el objetivo de ayudar a la estabilización y reconciliación del país.
La guerra de la RDC comenzó en agosto de 1998, con el levantamiento armado de los líderes militares tutsi congoleños o banyamulengues, apoyados por Ruanda y Uganda, que acusaban al presidente congolés, Laurent Kabila, de corrupción y mala administración.
Cerca de 3 millones de personas murieron durante la guerra, la mayoría de enfermedades y hambre, y pese a que en 1999 se negoció un alto el fuego, la violencia persiste en la región oriental del país.
La tensión aumentó en junio, cuando militares sublevados del ejército congolés tomaron la ciudad de Bukavu, en el este del país, por lo que se acusó a la MONUC de no haber actuado para proteger a la población civil. EFE
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