Bogotá, 4 oct (EFE).- La Fiscalía General de Colombia pidió hoy la "detención domiciliaria" para un pirata aéreo inválido, que secuestró un avión con 25 pasajeros a bordo el pasado 12 de septiembre.
La misma Fiscalía había solicitado ayer lunes el regreso a prisión de Porfirio Ramírez Aldana, el secuestrador del aparato y quien recibió la semana pasada el beneficio de libertad condicional al argumentar el juez de la causa errores de procedimiento.
Ramírez, junto con un hijo menor de edad, desvío un avión de la empresa Aires (Aerovías de Integración Regional S. A.) tras amenazar a los pilotos con detonar una granada.
La Fiscalía explicó hoy que ha considerado los argumentos de la defensa de Ramírez, que pidió la excarcelación por motivos de salud, y señaló que tras evaluar las pruebas y testimonios médicos concluyó que el secuestrador "necesita tratamiento" especial.
El ente acusador pidió que la detención domiciliaria debe ser estricta y por ello solicitó que Ramírez sea vigilado por personal del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC).
La misma Fiscalía considero ayer que "hay suficientes pruebas testimoniales y materiales que evidencian la peligrosidad" de Ramírez, pero hoy insistió en que "debe evitar la cárcel" para proseguir su tratamiento médico.
El pirata aéreo secuestró el avión de Aires que volaba desde Florencia (sur) a Bogotá, y no permitió una escala en Neiva, aunque finalmente aterrizó en la capital colombiana.
Tras casi cinco horas de negociaciones con las autoridades, depuso su actitud, fue detenido y permaneció hasta la semana pasada en prisión.
Ramírez debe responder por los cargos de secuestro con extorsión, desvío de aeronaves y tenencia ilegal de armas y explosivos.
Según Ramírez, con el secuestro del avión intentó reclamar una indemnización oficial, pues asegura que su invalidez permanente fue culpa del Estado, cuando en 1991 recibió un disparo en una operación antinarcóticos en Florencia (Caquetá, sur).
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