Asunción, 14 ene (EFE).- Los familiares de Cecilia Cubas, secuestrada desde el pasado 21 de septiembre, celebraron hoy una misa dos horas después de cumplirse el plazo dado por el padre de la joven, el ex presidente paraguayo Raúl Cubas, para que la entregaran.
Cubas, jefe de Estado entre 1998 y 1999, declaró hoy a medios de comunicación que los captores tenían hasta las 18:00 (21:00 GMT) para entregar a la joven ya que la Fiscalía y la Policía tenían, dijo, información sobre su identidad y paradero.
El fiscal general del Estado, Oscar Latorre, desvinculó posteriormente a la Fiscalía del establecimiento del plazo y dijo que era una asunto que competía "única y exclusivamente a la familia" para tratar de reanudar las negociaciones.
El ex jefe de Estado reiteró el ofrecimiento de una "importante suma de dinero adicional" para encontrar una solución pactada con los secuestradores que permita garantizar la seguridad de su hija.
Antes de la misa, que se ofició frente al domicilio familiar con la presencia de más de un centenar de personas pero sin Raúl Cubas, la madre de Cecilia, Mirtha Gusinky, lamentó el silencio con que han vuelto a responder los captores a la oferta de la familia, tras semanas sin comunicación con ellos.
No obstante, la madre de Cecilia dijo que espera el milagro de la liberación de su hija y que confía en el trabajo que están haciendo con "mucho esmero y amor en su trabajo" la Fiscalía y la Policía.
A pesar de que durante la tarde representantes del Ministerio Público acudieron al domicilio de los Cubas, las autoridades no han informado de la puesta en marcha de dispositivo de búsqueda alguno, aunque medios de comunicación locales indicaron que había un refuerzo de las dotaciones de militares y policías en el departamento de Caaguazú, en el este del país.
En ese departamento se hizo la primera y, hasta el momento, única entrega de dinero de la familia Cubas a los secuestradores. EFE
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