El expresidente etíope Tesfaye Gebre Kidan, antiguo brazo derecho del dictador Mengistu Haile Mariam, falleció el pasado 2 de junio en la embajada italiana en Adis Abeba, donde permanecía refugiado desde hacía 13 años, informó el viernes el Ministerio italiano de Asuntos Exteriores.
Kidan ocupó la Presidencia de Etiopía por espacio ocho días durante el convulso desplome, en mayo de 1991, del régimen marxista de Mengistu, quien huyó del país acosado por la guerrilla del Frente Democrático Revolucionario del Pueblo Etíope (FDRPE).
Sin embargo, a los pocos días el heredero político de Mengistu se vio obligado a buscar asilo en la embajada italiana en Adis Abeba, junto con otros funcionarios del gobierno de Mengitsu al ocupar el FDRPE el poder, lo que creó una fuerte tensión entre Italia y las nuevas autoridades de Etiopía.
Tras varios días en la sede diplomática italiana, algunos se entregaron voluntariamente al nuevo gobierno, pero Kidan permaneció como refugiado junto con otros altos exfuncionarios del antiguo régimen, como el coronel Berhanu Baye.
En un comunicado, el Ministerio italiano de Asuntos Exteriores señaló que Kidan falleció “improvisadamente” en la tarde-noche del 2 de junio en las instalaciones de la embajada en Adis Abeba, sin ofrecer más detalles sobre las causas de su muerte.
La representación diplomática “ha facilitado desde el inicio a las autoridades etíopes competentes todos los elementos de información en su posesión sobre las circunstancias del deceso”, agregó el comunicado.
El fallecimiento de Kidan, sin embargo, ha removido la vieja tensión que existió por la cuestión de los asilados y ha llevado al Ministerio de Exteriores etíope a criticar a Italia por “esconder a criminales que deben responder de genocidio y crímenes de guerra”.
Ante estos comentarios, difundidos el viernes por medios italianos, el Ministerio de Exteriores de Italia indicó que “las autoridades etíopes han querido efectuar declaraciones públicas contrarias al espíritu de colaboración que ha prevalecido hasta ahora (...) en términos inaceptables”.
Añadió que “las autoridades etíopes conocen bien la posición italiana al respecto”, e insistió en que Italia no entregará a los otros asilados “con base al principio del derecho internacional general (...) y a la normativa europea sobre los derechos humanos interpretada por el Tribunal de Estrasburgo”.
En la embajada permanecen asilados el coronel Berhanu Baye y otro antiguo seguidor de Mengistu cuyo nombre no ha sido facilitado, y que de ser juzgados por las autoridades etíopes podrían ser condenados a la pena de muerte por crímenes de guerra.