“No tengo miedo. Más bien no me siento tranquilo”, dijo Hoyzer al semanario Sport Bild que aparecerá el miércoles.
Hoyzer fue condenado el 17 de noviembre de 2005 a 2 años y 5 meses de prisión por estafa en banda organizada, pena confirmada tras la apelación que presentara en diciembre de 2006. El ex árbitro había declarado que cobró unos 70.000 euros para influenciar en los resultados de varios partidos.
En total, 23 partidos disputados entre el 10 de abril y el 3 de diciembre de 2004 fueron manipulados, sobre todo de la segunda y tercera división del fútbol germano, pero también uno de la Copa de Alemania entre Hamburgo (D1) y Paderborn (D3), y otro del Campeonato de Turquía (Ankaragucu-Galatasaray).