Por Cristina Hasbún.
Comalapa (El Salvador), 9 abr (ACAN-EFE).- El cadáver del soldado salvadoreño Natividad Méndez Ramos, quien falleció el pasado 4 de abril en Irak, llegó hoy a El Salvador, a la Base Militar en Comalapa, donde fue recibido con honores por el Alto Mando de la Fuerza Armada.
El cuerpo de Méndez Ramos fue trasladado al país en un avión C-130 de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, procedente de la Base Militar de Dover (EEUU), adonde había llegado el pasado miércoles desde Kuwait.
El avión arribó hacia las 14.25 hora local (20.15 GMT) y era esperado con visible ansiedad y dolor por la madre del soldado muerto, Erminia de Méndez, una humilde mujer campesina de cuerpo menudo y piel curtida por el sol, ataviada con un sencillo vestido rosado.
Tras ser descendido del avión que lo trajo a El Salvador, el féretro fue llevado por media docena de militares, con música fúnebre de fondo, a un toldo donde ondeaban las banderas de El Salvador, Estados Unidos y España.
El único discurso que se pronunció en el acto fue el del vicario castrense, Fabio Colindres, quien pidió a la madre de Méndez Ramos fortaleza, tras recordar que su hijo le sería entregado un Viernes Santo, casi a la misma hora en que Jesucristo fue bajado de la cruz y entregado a su madre.
El ministro de Defensa de El Salvador, general Juan Antonio Martínez Varela, declaró posteriormente a la prensa que "definitivamente nosotros lamentamos muchísimo la muerte de nuestro compañero y le expresamos a su familia nuestro más sentido pésame".
Agregó que "le hemos recibido como un verdadero héroe de la patria que es y lo vamos a recordar nosotros siempre".
Méndez Ramos, de 20 años, era miembro del Batallón de Paracaidistas de la Fuerza Armada y había viajado a Irak en febrero pasado como parte de los 380 efectivos salvadoreños de la tropa que relevó a otro grupo de 360 que habían trabajado en las labores de reconstrucción del país árabe durante seis meses.
El soldado murió el domingo pasado en un ataque perpetrado por manifestantes chiítas a la base del Batallón Cuscatlán, de El Salvador, en la ciudad de Nayaf, hecho en el que otros doce efectivos resultaron heridos.
La tropa salvadoreña forma parte de la Brigada Plus Ultra que comanda España, en la que también participan contingentes militares de Honduras y de República Dominicana.
Martínez Varela confirmó que tres de los militares heridos, los cabos Rafael Ramírez Pérez, Noé Hernández Vásquez y Carlos Echeverría Vides, fueron trasladados desde Bagdad, donde eran atendidos en hospitales de la coalición, a la base militar estadounidense en Landsthul, Alemania.
El ministro dijo que la tropa salvadoreña permanecerá en Irak hasta cumplir su compromiso, en agosto próximo.
"El Batallón Cuscatlán va a continuar con su misión humanitaria que le fue encomendada y por el momento se mantendrá en Nayaf", afirmó Martínez Varela, al indicar que la extensión de un plazo para ello dependerá de la Asamblea Legislativa.
Informó de que hasta ahora las principales labores de los soldados salvadoreños han sido "más que todo ayudar a la población de Irak en el área que les ha sido asignada, que es apoyar a las diferentes escuelas con la repartición de víveres, algunos equipos".
El cadáver de Méndez Ramos fue trasladado de la Base Militar de Comalapa, situada a unos 50 kilómetros de San Salvador, en un helicóptero hacia Guaymango, su pueblo de origen, en el departamento occidental de Ahuachapán, donde mañana, sábado, será sepultado.
La madre y otros familiares del soldado muerto fueron trasladados en otro helicóptero de la Fuerza Aérea Salvadoreña.
Al acto en la Base Militar de Comalapa asistieron el embajador de Estados Unidos en El Salvador, Douglas Barclay; el encargado de negocios de la embajada de España, Rafael Reig, y el comandante del Ejército Sur de EEUU, general de Brigada, Jack Gardner. ACAN-EFE
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