
El único camposanto rebuscado que habla en ska , Panteón Rococó, ha dado pistas de vida. Después de un rato de silencio los de Madre Candela asoman la nariz para dar buenas nuevas a los seguidores del alternativo género de fusión.
Para muestra un botón: hoy el Panteón dará un gran concierto en la Ciudad de México -será un fiestón para celebrar que cumplen diez años dentro de la escena mexicana del ska -. El recital será el primer paso de producción fuerte para este año, pues a partir de este concierto que la banda grabará el material necesario para editar un DVD.
Amigo Cadillacs. No será cualquier concierto el de hoy, los de Panteón contarán con un invitado que es un peso pesado en el ska latino: el argentino Favio Cianciarullo, exguitarrista de Los Fabulosos Cadillacs. El que fuera compañero de "armas" de Vicentino se subirá al escenario para interpretar alguno de sus temas junto al Panteón. Será una colaboración digna de ver, en vivo o diferido.
Pasarán los años, pero Panteón Rococó no pasa de sí. Anunció que también prepara un nuevo disco que incluirá temas inéditos y nuevas versiones de canciones ya conocidas o prensadas en álbumes anteriores. Quizás parte del material de ese disco pueda salir también del concierto con el que hoy Rococó encenderá a México.
Para quedarse en forma Panteón emprenderá larga caminata porque también anunció que en este 2005 hará su cuarta gira por Alemania y otros países de Europa.
Ya la banda de Cumbia del olvido había estado este año por Centroamérica porque mueve el disco Tres veces tres que publicó con Delanuca Records y del cual fue Cianciarullo el productor y que contó, encima, con invitados de renombre; Vicentico, por ejemplo, Mimi Maura, Andrés Jiménez -cantante y cerebro de A.N.I.M.A.L.- y aunque parezca raro, el Subcomandante Marcos.
Panteón siempre ha dado mucho de qué hablar.
Pero en los últimos meses el bla bla bla alrededor del grupo es su afinidad con el Subcomandante Marcos, el que apareciera en el disco da fe pública de la conexión que la banda tiene con la causa del rebelde Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), pues abiertamente el Panteón ha hecho público su apoyo a esa organización que saca roncha.