¿Le tiene usted miedo a las computadoras? ¿Siente que puede terminar destruyéndolas por completo si toca la tecla incorrecta? ¿Le parece que el mouse es un artefacto casi imposible de manejar?
Aunque parezca un poco exagerado de primera entrada, muchos adultos mayores responden afirmativamente a estas preguntas cuando no están familiarizados con el mundo de la computación.
Tener hijos o nietos que sí conozcan de computación e Internet no es garantía de que el adulto mayor aprenda a manejarlas.
“A mí intentaron explicarme, pero cuando yo preguntaba algo me decían ‘ya eso se lo expliqué’ o ‘ahorita le enseño de nuevo’”, comentó Zeidy Muñoz.
“Aunque uno ya no es como una esponja, sí podemos aprender. Lo que necesitamos es paciencia, carisma y que nos motiven a participar”, añade Elizabeth Carvajal.
Tras recibir sus cursos en Ageco, doña Zeidy y doña Elizabeth llegaban a practicar a la casa y hoy, un par de años después de sus primeros cursos, lo mismo actualizan su estado en la red social Facebook que pagan los recibos en las páginas web de los bancos o chatean con sus familiares en el exterior.
“Antes yo llamaban a mi hermana a Estados Unidos una vez cada tres meses y teniendo en cuanta siempre lo caro que era la llamada. Ahora, chateo con ella a diario si quiero. ¡Hay momentos en que simplemente ya no tengo nada nuevo qué contarle!”, dijo doña Elizabeth.
Si usted quiere obtener más información sobre los cursos de computación especiales para personas adultas mayores –los cuales no son gratuitos– puede llamar al teléfono 2277-3550 de la Universidad Nacional o al 2542-4500, de Ageco.