Londres. En un estudio que confirma la creencia popular, un grupo de investigadores comprobó que el consumo habitual de alcohol, en particular de cerveza, puede duplicar el riesgo de padecer la gota.
Esta es una de las enfermedades más antiguas que se conoce, la cual ataca las articulaciones y es la principal causa de artritis en el hombre. Es menos común en la mujer, que la padece después de la menopausia.
La bebida ha sido considerada, durante siglos, una de las causas de la gota, pero esa relación se probó por primera vez en un estudio publicado ayer en la revista médica The Lancet.
La investigación descubrió que incluso una cantidad mínima de alcohol puede aumentar el riesgo y que la cerveza es la bebida que más provoca la gota.
En el estudio fue realizado por científicos del Hospital General de Massachusetts, el Hospital Brigham y la facultad de medicina de la Universidad de Harvard, quienes examinaron durante 12 años a 47.150 hombres que no padecían de gota.
Cuando el estudio terminó, 730 hombres -casi un 2 por ciento del total- sufrían de gota.
Mientras mayor era el consumo diario de alcohol, más probable fue la aparición de la enfermedad. El consumo de licor aumentó en un 15 por ciento la posibilidad de sufrirla.
La mayor posibilidad, un 50 por ciento, se registró entre los bebedores de cerveza.
"Dos o tres cervezas al día incrementan el riesgo de gota 2,5 veces comparado con quienes se abstienen de beberla. La misma frecuencia y cantidad de consumo de licores incrementa el riesgo 1,6 veces comparado con los que se abstienen de consumir licores", precisó el reumatólogo Hyon K Choi, uno de los investigadores del Hospital General de Massachusetts.
¿Mejor un vinito?
Durante el estudio no se presentó un aumento del riesgo de padecer gota entre los 18 hombres que bebían más de dos vasos de vino diarios.
Sin embargo, los expertos señalaron que fueron muy pocos los participantes que bebieron vino en la cantidad necesaria para determinar si esa bebida era una alternativa más segura.
"No se puede excluir del todo la posibilidad de que el consumo de vino, en gran escala, sea problemática. Todavía no se sabe si existen otros factores de riesgo o factores de protección en el vino", aclaró Hyon Choi.
Según dijo, es posible que alguna otra sustancia, aparte del alcohol en las bebidas, jugó un papel importante en los pacientes investigados.
Estimó que podría tratarse de un químico llamado purina, que se encuentra en mayor cantidad en la cerveza que en otras bebidas alcohólicas y que podría aumentar el efecto del alcohol.
"Esta bebida posee un elevado nivel de purina, un componente químico que se convierte en ácido úrico", explicó.
La gota es ocasionada por el exceso de ácido úrico en la sangre. El ácido forma depósitos de cristal en las articulaciones, particularmente en los dedos de los pies y en los tobillos.
Poco a poco, la piel que rodea la hinchazón se tensa y adquiere un color rojizo
La dolorosa inflamación de las articulaciones ha sido inmortalizada y estigmatizada por poetas y dramaturgos, que en ocasiones escribían sobre sus propias experiencias, como maldición de los bebedores.