EscucharEscritor, filólogo, periodista, entomólogo, bibliófilo y crítico francés, el primer autor romántico no clásico que formó parte de la Academia Francesa.
Se le recuerda especialmente por sus novelas y narraciones cortas. R. Purnal dice: "Nodier, uno de los espíritus más curiosos , nobles e imaginativos, con gusto por la paradoja y el culto de la forma, ha merecido conservar por mucho tiempo la atención de los literatos".
Nació en Besancon, en el hogar de un abogado que llegó a ser presidente del Tribunal Criminal. De precoz inteligiencia, estudió griego en Estrasburgo y asistió a los cursos de la Ecole Centrale de Besancon. A los 16 años fue nombrado bibliotecario adjunto en su ciudad natal, donde, atraído por la entomología , dos años después publicó un ensayo sobre el uso de las antenas en los insectos que fue base de una de sus obras más importante, Bibliografía entomóloga .
En 1801 se trasladó a París y entró en contacto con obras literarias extranjeras, cuya influencia, cada vez mayor, preparaba el advenimiento del Romanticismo. Tras la publicación de una recopilación de Pensamientos de Shakespeare , decidió convertirse en novelista y escribió Los proscritos y El pintor de Salzburgo , obras inmaduras y artificiosas, a las que siguió una colección de poemas de similar factura. Habiendo cometido la imprudencia de atacar al Primer Cónsul en un oda titulada La Napoleona , hubo de sufrir prisión durante varios meses.
Cuando recobró la libertad se dedicó a estudios filológicos y en 1806 publicó un Diccionario de palabras onomatopéyicas francesas , que le valió el cargo de secretario del caballero Croft, un sabio filólogo inglés en cuya casa de Amiens pasó tres años. Regresó a París en 1811 y, con la Restauración, fue redactor del Diario de Debates que combatió ardorosamente el régimen napoleónico.
Separándose cada vez más de la política comenzó a dar una total medida de sí mismo con la publicación de una serie de obras narrativas en las que la fantasía va unida a un lenguaje incomparable, Jean Sbogar, Therese Aubert, Adele.
Por esa época comenzó a reunir semanalmente en su salón a los jóvenes escritores del Romanticismo: Víctor Hugo, Musset, Vigny, Lamartine y se convirtió en el centro de este gran movimiento literario.
A partir de 1830 sufrió alteraciones nerviosas y dificultades económicas y afectivas que le provocaron un profundo pesimismo; éste se refleja en sus últimas obras de carácter onírico o fantástico: El hada de las migajas, La novena de la Candelaria e Historia del perro de Brisquet . Falleció en París.
