Nació en Oberplan, pequeña localidad de la selva de Bohemia, en familia humilde. Estudió con los benedictinos en el Instituto de Kremsmunster, y en la Universidad de Viena se graduó de abogado ; sin embargo, siempre se sintió atraído por las ciencias naturales y la pintura, inclinaciones que fueron de gran importancia en la formación de su estilo y su técnica de escritor. Aún sin haber seguido estudios regulares, cultivó también las Matemáticas, la Física y la Astronomía.
En 1840 se dio a conocer con el cuento El cóndor . En los años siguientes dio a la luz seis tomos de Estudios , y varias colecciones de relatos: El solterón , La carpeta de mi bisabuelo, Brígida y El sendero en el bosque , obras que le dieron celebridad , ya que figuran entre los textos más bellos de la narrativa alemana. En ellos, el ambiente puro de la naturaleza cuyas manifestaciones están descritas de modo posiblemente no superado envuelve los más simples y singulares destinos humanos, y les proporciona consuelo, salvación y paz. El ardor de su temperamento y la influencia estilística del romanticismo ceden paso a la plácida luz de una religiosidad íntima, de una elevada ética y una viva conciencia artística, en su siguiente obra, Piedras Polícromas .
En reconocimiento a sus méritos literarios y para otorgarle un estipendio fijo, en 1850 fue nombrado director de las escuelas de Linz. Inclinado al escrupuloso cumplimiento del deber, se dedicó apasionadamente a esta labor, procurando introducir nuevas orientaciones en el sistema escolar, y escribió Ensayos sobre la teoría del Estado, el problema de la libertad, la naturaleza y la esencia de la escuela . Al retirarse del cargo viajó a Italia y en Trieste escribió sus últimas obras maestras, Veranillo de San Martín y la novela histórica bohemia Witiko , en la que el personaje central es todo un pueblo.
Enfermo de cáncer en el hígado, regresó a Linz. Padeció intensos dolores tanto físicos como familiares, y se suicidó.