Sonido amplio y sedoso, afinación justa, digitación ágil y golpe de arco firme distinguieron el desempeño del violista mexicano Omar Hernández-Hidalgo, en cuyas manos vibró la voz resonante del magnífico instrumento construido por el renombrado lutier Hiroshi Iizuka.
El pianista Mauricio Náder, su compatriota, completó con seguridad y aplomo el dúo de viola y piano que ofreció un recital en el
Manuel Enríquez (1926-1994) se considera entre los compositores mexicanos de mayor influjo de la segunda mitad del siglo XX. A partir de los años 60 su música rompió con el nacionalismo imperante en su país y evolucionó hacia un lenguaje armónico influenciado por el serialismo y la atonalidad, la vanguardia de entonces.
Sus
Coterráneo de Enríquez, Joaquín Gutiérrez-Heras (n. 1927) ha incursionado principalmente en la música para cine, aunque también ha compuesto música sinfónica y de cámara. La sentimental
La siguiente pieza,
Cedo la palabra a Cardona: “Esta obra se inspira en el alucinante barrio La Merced de la Ciudad de México. Nos encontramos con una suerte de folclor imaginario, en donde ciertos elementos tradicionales se hallan deformados o reinventados en el contexto de una realidad urbana llena de personajes del más diverso origen y marcada por un trajín incansable que absorbe a todo y a todos.”
La
La ejecución de las dos sonatas requiere de mucho virtuosismo, en especial de la viola, y ambos intérpretes estuvieron a la altura de los requerimientos de las piezas.
Entre las sonatas, al final de la primera parte, se oyó el estreno mundial de
Concebida en un solo movimiento,
Así la describe el compositor: “La pieza conduce a la reflexión que rodea al personaje en los momentos anteriores a su muerte. La fuerza de sus pensamientos lo devuelve al pasado, que se refleja en imágenes, como la de su esposa en un luminoso coral; el diálogo con el general Cañas, en un contrapunto turbulento, que lo traslada al trágico momento culminante del camino hacia el patíbulo y al instante de la ejecución.”
Las cinco obras demandan una escucha atenta y el admirable desempeño de los intérpretes mantuvo el interés auditivo del público a lo largo del recital.