A la doctora Megan Hunt el éxito le sonreía. Ocupaba el puesto de neurocirujana en un prestigioso hospital universitario de la ciudad de Filadelfia hasta que un desafortunado accidente de tránsito le cambió la vida.
El trágico evento se sumó al trauma emocional surgido tras un amargo divorcio y a la pérdida de la custodia de su hija. Pero Megan no es una mujer que se da por vencida. A pesar de las vicisitudes mencionadas, ella emprende una nueva carrera profesional, esta vez como médica forense, puesto en donde resulta tan brillante como en su antigua labor de cirujana sin el riesgo que implica trabajar con pacientes vivos. “No puedes matar a alguien que ya está muerto”, responde ella con su característico sarcasmo cuando es cuestionada por el cambio de profesión. Su agudo instinto y vastos conocimientos médicos le sirven ahora, no para diagnosticar a los vivos, pero sí para encontrar pistas que ayuden a resolver el misterio oculto en los cuerpos de los muertos y llevar ante la justicia a los responsables de sus decesos.
Body of Proof (El cuerpo del delito) es la nueva serie de procedimiento policial que se estrenó para Latinoamérica por el canal Sony. El show es una producción de los estudios ABC, cuya premier en Los Estados Unidos, en marzo pasado, atrajo una audiencia de 14 millones de espectadores. Escrita por Chris Murphey, quien también funge como productor ejecutivo, Body of Proof pretende destacarse entre las series policiacas no solo por resolver crímenes de manera ingeniosa en cada uno de sus episodios, sino por la fuerza en el desarrollo de sus personajes y la exploración de sus vidas más allá de sus exigentes trabajos.
El peso de las historias recae en su protagonista Megan Hunt, quien es interpretada por la actriz Dana Delany, muy conocida aquí por su papel de Katherine Mayfair en la exitosa comedia Amas de Casa Desesperadas.
“El cuerpo es la evidencia. Te dirá todo lo que necesitas saber”, dice Megan retratando con claridad el espíritu de una serie en donde la heroína asegura aprender más de los cuerpos silenciosos e inertes que examina que durante sus conversaciones con los vivos.
“¿Qué me encanta de Megan? Ella es graciosa y encantadora, pero impaciente y tenaz. Puede ser áspera en un momento y dolorosamente vulnerable al siguiente. Puede que no seamos tan inteligentes como ella, pero tampoco tan destrozados.”, dice Cris Murphey acerca de su personaje.
Esa compleja personalidad de Megan, arrogante, tosca y sensible a la vez, promete ser un atractivo para los espectadores, quienes no querrán perder detalle de sus impetuosos encontronazos cotidianos con policías y asesinos mientras ella intenta sobreponerse a su arruinado matrimonio y distanciamiento obligado de su joven hija, Lacey.
“No crean todo lo que oigan de mí”, dice Megan a un grupo de policías asignados a un caso, “la verdad puede ser mucho peor”, agrega para dejar en muy en claro con la clase de persona que deberán lidiar. El método particular utilizado por la doctora Hunt suele entorpecer las investigaciones dado su nivel de involucramiento con las historias ocultas en los cuerpos que analiza.
“Ella está más conectada con las personas fallecidas, de hecho les llama sus pacientes. Considera que hay un ser vivo ante ella hasta que les manda al otro lado. Y no les va a decir realmente adiós hasta que no les pueda dar descanso, hasta que no sepa qué les ocurrió”, dice Delany sobre Megan Hunt, a quien considera un personaje en transición. “Era un poco arrogante y ahora está aprendiendo a estar con personas, socializarse con ellas, escucharles, pero está creciendo todavía”, explica la actriz.
La resolución de crímenes siempre estará acompañada por la búsqueda incesante del amor, felicidad y el autoconocimiento de Megan, cuya certeza en su trabajo como forense no logra equipararse con su siempre titubeante vida personal. “La muerte es inevitable. La ironía es que la muerte ha traído nueva vida a Megan Hunt. Mientras ella investiga que sucedió a sus víctimas, sus vidas y las lecciones que ellos encierran se convierten en una especie de legado para ella, para aprender y aplicar en su propia vida, si tiene el coraje para hacerlo”, relata el creador de Body of Proof, Chris Murphey.
Sólido elenco
Al lado de Megan está el detective Bud Morris (John Carroll Lynch, Fargo), terco y veterano oficial de la división de Homicidios de Filadelfia, quien alterna su lucha contra el crimen en las calles con una lucha personal en el hogar para salvar su matrimonio. Morris tiene frecuentes enfrentamientos con Megan por discrepancias en el enfoque de las investigaciones de los crímenes.
Windell Middlebrooks, en su primer papel permanente en una serie de televisión, encarna al doctor Curtis Brumfield, subdirector de la medicatura forense y técnicamente el jefe de Megan, aunque en la práctica poco a poco llegará a darse cuenta de que nadie es jefe de Megan. Aún así, el doctor Curtis sobresale por su capacidad e inteligencia, y sus bravuconadas solo ocultan un gran amor por su trabajo, tan grande como su confesa obsesión por los insectos.
Como parte del grupo de médicos forenses, el doctor Ethan Gross (Geoffrey Arend), quien descubrió su vocación luego de presenciar su primera autopsia en la escuela de medicina (de inmediato renunció a la pediatría por patología forense) es el más joven y entusiasta forense de la medicatura.
Admirador del trabajo de su colega, la doctora Hunt, para Ethan el principal reto de su labor no tiene que ver con el saber científico ni sus proezas en el campo de la medicina, sino con aprender a aplicar el conocimiento adquirido en procura de aliviar el dolor de las familias de dolientes.
Se suma al reparto la doctora Kate Murphy (Jeri Ryan, Melrose Place, Matlock), quien es nada más y nada menos que la primera mujer en ocupar el cargo de Jefe Forense en toda la historia de Filadelfia. Ella conjuga su profesión de patóloga con una carrera política y esto la obliga a mantener en equilibrio las relaciones con el personal de la medicatura, el departamento de policía y el ayuntamiento. Aunque mantener a raya a la doctora Hunt le demande mucho tiempo y energía, ambas encontraron causa común en la búsqueda de la verdad que ayude a las familias de las víctimas a encontrar consuelo.
Al igual que la doctora Hunt, otro que halló su vocación a través del infortunio fue Peter Dunlop (Nicholas Bishop), investigador y médico legal de la oficina forense de Filadelfia.
Dunlop fue policía la mayor parte de su vida hasta que resultó herido en un tiroteo durante un asalto de una tienda. Incapacitado e internado en una clínica de rehabilitación, luego de concluir un período de tres meses de terapia física, Dunlop optó por la medicina forense como su nueva carrera.
Completan la nómina la detective Samantha Baker (Sonja Sohn, The Wire). A diferencia de su colega Bud Morris, Baker se identifica con el método empleado por la doctora Hunt y trabaja fuerte para ayudar a solventar los intrincados acertijos criminales.
Más que autopsias
La crítica de los principales medios estadounidenses ha estado dividida en torno a la serie. Entertainment Weekly destaca el trabajo de Delany en el papel de Megan, el cual le confiere a Body of Proof un estatus superior al de otros programas de su género.
Los Angeles Times también alaba el papel de Delany, de quien dice “es una actriz siempre interesante de ver” y la calidad del elenco que la acompaña, aunque no habla tan bien sobre el desarrollo de los personajes lo cuales califica de “acartonados” y se queja además de la predictibilidad del guion.
Los más críticos no ven mayor diferencia entre Body of Proof y otras series del género como House, Grey´s Anatomy, Bones o CSI, sin embargo, la primera en defender la serie y marcar sus diferencias es la propia Dana Delany. Ella opina que el show tiene una base diferente a cualquier otro drama médico al intentar ir más allá de una simple investigación o autopsia. “La doctora Hunt era cirujana neuróloga antes de que fuera forense. A ella le interesaba la ciencia curativa así que, por ello, ahora lo que le interesa es la ciencia del saber qué hay detrás. La mayoría de los forenses solo analizan la causa de la muerte de las víctimas pero ella quiere saber también por qué mueren, cómo mueren o quién fue parte de su vida” dijo la actriz en una entrevista para el medio digital ElMundo.es y agregó: “Sí, creo que cada semana tenemos un misterio como CSI o House, pero considero que hemos creado un nuevo e interesante híbrido, en El cuerpo del delito tenemos algo diferente, tenemos aspectos humanos”. 1