México. El guitarrista británico Eric Clapton se despidió de Latinoamérica con un gran concierto ante cerca de 50.000 personas en la capital mexicana como parte de su gira Reptile Tour 2001 , la última del artista.
El viernes 19, Clapton abarrotó el Foro Sol de la Ciudad de México y se metió al público en el bolsillo con una actuación impecable, en la que demostró que sigue siendo uno de los mejores músicos del mundo.
Los fanáticos mexicanos del rock y el rythm and blues disfrutaron de los nuevos temas de Reptile y corearon los éxitos cosechados por Eric Clapton durante cerca de cuarenta años de carrera.
Tears in Heaven y Layla fueron las más aplaudidas de un repertorio que incluyó temas como Change de World , My Father's Eyes , She's Gone y una versión del Hoochie Coochie Man.
En los bises, tras dos horas de concierto, el público mexicano consiguió quebrar la seriedad de Clapton y le arrancó una sonrisa, mientras miles de encendedores iluminaban la noche al compás de las palmas que arroparon su interpretación de Somewhere over the rainbow.
Vivas a Slow Hand (mano lenta), el apodo que se ganó el guitarrista tras su paso por The Yardbirds, y pancartas con la leyenda Clapton is God (Clapton es Dios), en alusión a las pintadas que aparecieron en Londres durante su época con los John Mayall's Bluesbreakers, sirvieron de homenaje para el llamado "rey blanco del blues", que ha anunciado que Reptile Tour 2001 será su última gira de conciertos.
Clapton, de 56 años, eligió México para despedirse de América Latina tras pasar por los escenarios de Santiago de Chile, Buenos Aires, Montevideo, Porto Alegre (Brasil), Sao Paulo y Río de Janeiro.
Reptile Tour 2001 empezó en febrero en Europa, siguió en Estados Unidos y concluirá en los dos últimos meses del año en Asia.