Santiago. Millones de chilenos votarán hoy, jueves, en las elecciones parlamentarias para escoger entre la coalición de gobierno que pretende borrar el legado del exrégimen militar, y la oposición que quiere perfilarse como opción de gobierno.
La lucha electoral se ha centrado en el Senado, controlada actualmente por la oposición derechista, gracias al concurso de ocho legisladores designados por el régimen del general Augusto Pinochet, que para el bloque gobernante se ha convertido en un obstáculo para sus proyectos de reforma democrática.
Así, incluso el presidente Eduardo Frei llamó a la población a apoyar a la gobernante Concertación de Partidos por la Democracia, para permitir al bloque equilibrar las fuerzas en la cámara alta.
En la cámara de diputados, los pronósticos apuntan a mantener la actual distribución de fuerzas, con predominio del bloque gobernante.
Entre tanto, la coalición derechista Unión por Chile espera salir de la elección con un nivel de respaldo que le permita perfilarse como opción para gobernar el país tras las elecciones presidenciales de 1999.
Números vitales
Para la alianza en el poder, el Senado ha sido el impedimento para impulsar leyes que aseguren la plena democratización del país tras 17 años de dictadura de Pinochet (1973-1990), quien en marzo asumirá el puesto de senador vitalicio gracias a la constitución que él mismo impulsó en 1980.
Dos proyectos considerados claves han sido bloqueados en la cámara alta. Uno de ellos para la eliminación de los senadores designados y otro para modificar el sistema binominal de elecciones, que ha permitido a la derecha mantener cierto equilibrio de fuerzas en el parlamento pese a su menor votación.
El sistema electoral chileno postula dos puestos por cada distrito o circunscripción. Para que un bloque político obtenga los dos cupos, deben alcanzar el doble de votos que la lista que le siga más de cerca.
El Senado está conformado por 38 senadores elegidos en 19 distritos, más otros nueve designados por las fuerzas armadas, la Corte Suprema, las universidades, la contraloría y el Gobierno.
Según el senador socialista Carlos Ominami, si logran la meta de doblar a la derecha en tres de las 10 circunscripciones en votación, la concertación contaría con 22 escaños electos, a los que se sumarían dos designados por el Gobierno, lo que no es suficiente para lograr la mayoría de dos tercios y contrarrestar a la oposición.
A su juicio, la derecha podría endurecer su posición en la cámara alta con la llegada de la llamada "bancada militar", que encabezaría Pinochet como senador vitalicio, y cuatro miembros retirados de los aparatos de seguridad en calidad de designados.
Cargos en juego
AP.
Santiago de Chile. Medio millar de candidatos competirán hoy por 120 sillones de diputados y 20 de senadores, en una elección que parece atraer más porque desatará una carrera de aspirantes presidenciales para 1999.
Estos son los sextos comicios democráticos desde que los militares entregaron el poder en 1990.
Los 508 aspirantes a legisladores disputarán la totalidad de los asientos de la Cámara de Diputados -120- y 20 de los 38 sillones del Senado.
El oficialismo y la oposición se enfrentan en sendas alianzas electorales. Por el Gobierno: la Democracia Cristiana y los izquierdistas partidos Socialista y Por la Democracia, y los socialdemócratas. La oposición está representada por Renovación Nacional y la ultraderechista Unión Demócrata Independiente.
La verdadera competencia está en el Senado, ahora en manos de la derecha política, ayudados por los nueve senadores designados por el pasado régimen militar.
Empero, entre el 11 y el 26 de este mes, serán renovados por primera vez estos llamados senadores institucionales.
De los nueve, cuatro serán para el ejército, la armada, la fuerza aérea y la policía; otros dos los designa el presidente Eduardo Frei, y los tres últimos tres serán nombrados por la Corte Suprema.