
Irdning, Austria (AP). El técnico del Real Madrid declaró el miércoles que no tomará medidas disciplinarias contra Robinho y Thomas Gravesen por la pelea que protagonizaron en un entrenamiento de pretemporada.
La gresca ocurrió el martes luego que el delantero brasileño Robinho se molestó por las reiteradas faltas de su compañero danés durante un partido de práctica en esta localidad austríaca.
Los jugadores fueron expulsados por Capello.
Actué como un árbitro, saqué tarjeta roja y al vestuario lo dos, dijo Capello, citado por el portal de Internet del Real Madrid, restando importancia al incidente.
Son cosas normales, que pasan siempre, es el final de la pretemporada y están cansados, añadió el entrenador italiano.
El Real Madrid completará el viernes su pretemporada en Austria y seguido viajará a Estados Unidos para una gira de amistosos contra clubes de la MLS.