París . Un organismo basado en Londres y financiado por el Departamento de Estado norteamericano pidió este viernes el apoyo de Francia para juzgar al presidente iraquí, Saddam Hussein, por "genocidio" y "crímenes contra la humanidad".
Participaron en la conferencia donde se planteó este problema asociaciones de derechos humanos como la Fundación Francia Libertades, de Danielle Mitterrand (viuda del expresidente francés Francois Mitterrand), Human Rights Watch, el premio Nóbel de la paz José Ramos Horta y la oposición iraquí agrupada en un "Congreso nacional iraquí" (CNI).
"Llamamos al gobierno francés a apoyar la instalación de un tribunal penal internacional para juzgar a los responsables del régimen iraquí actual por crímenes de guerra, crímenes contra la humanidad y genocidio", dijo la asociación Indict.
Indict, creada en 1997 y presidida por la diputada laborista británica Ann Clwyd, hace campaña internacional contra Saddam y 11 otros dirigentes iraquíes entre los cuales sus dos hijos, su viceprimer ministro Tarek Aziz y el ministro de defensa Ali Hassan al Majid.
"El régimen de Saddam Hussein ha cometido violaciones de derechos humanos que se encuentran entre las peores después de la Segunda guerra mundial", declaró Clwyd.
"La misma voluntad que ha permitido la inculpación de responsables del genocidio de Ruanda y en ex Yugoslavia debe manifestarse en el caso de Irak", agregó.
Entre las acusaciones figuran bombardeos en marzo de 1988 con gases químicos contra los habitantes de la ciudad kurda de Halabja, noreste de Irak, que dejó cinco mil muertos, campaña militar Anfal que liquidó a decenas de miles de kurdos, asesinatos de opositores al régimen, represión de poblaciones chiítas del sur de Irak en 1991.
"Las matanzas perpetradas por el régimen iraquí continúan hoy", aseguró la presidenta de Indict.
Francia nunca se ha asociado a los deseos de Washington y Londres de destruir al régimen iraquí.
Interrogada por la AFP, Clwyd rechazó la acusación de que Indict sirve los intereses norteamericanos: "somos independientres y aceptaría con placer fondos del gobierno francés", dijo.
Indict está basado en Londres sin dirección oficial y recibió 600.000 dólares del Departamento de Estado norteamericano, uno de sus principales apoyos.
Danielle Mitterrand reiteró por su parte el llamado que lanzó el cinco de abril en Ginebra a favor de la creación de un tribunal penal.
Esta campaña en Francia ha sido denunciada por asociaciones francesas de amistad con Irak, que denuncian que Indict "es financiada por el Congreso de Estados Unidos para derrocar al presidente Saddam Hussein con la esperanza de reemplazarlo por hombres favorables a los intereses norteamericanos".
Edición periodística: Adriana Quirós Robinson, La Nación Digital. Fuente: agencias.