Washington, 3 mar (EFE).- El presidente estadounidense, George W. Bush, aseguró hoy a los empleados de la CIA que la reestructuración de los servicios de inteligencia del país no se traducirá en menor poder para la agencia.
Con el mensaje, Bush trató de infundir calma tras la reciente designación de John Negroponte como nuevo director nacional de inteligencia, que supervisará todas las agencias de espionaje e inteligencia del país.
"Las reformas ayudarán a la CIA a hacer mejor su trabajo", dijo Bush ante los periodistas tras una visita a la Agencia Central de Inteligencia (CIA), durante la que habló con los trabajadores de la principal entidad del espionaje estadounidense.
Las palabras de Bush llegan un día después de que el director de la CIA, Porter Goss, asegurase que la nueva ley crea "ambigüedades" entre su autoridad y la de Negroponte.
"Sé que hay algunas incertidumbres", dijo Bush, pero "estoy seguro de que el proceso funcionará".
El presidente aseguró que uno de los motivos de su visita a agencia era asegurar a los empleados que su trabajo es "vital".
El director de la CIA ha sido, durante 60 años, la autoridad máxima en materia de inteligencia, situación que cambiará con la toma de posesión de Negroponte. EFE
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