Londres, 9 may (EFE).- El mítico director sueco de cine y teatro Ingmar Bergman, de 84 años, abandonará por completo esas labores tras estrenar su última obra, "Sarabanda", afirmó hoy en Londres su musa y compañera durante años, la actriz noruega Liv Ullmann.
Ullman, que asistió en la capital británica a una proyección especial del clásico de Bergman "Scener ur ett aktenskap" (Escenas de un matrimonio, 1974), que ella misma protagonizó, afirmó que la última película que rodó para la televisión, "Sarabanda", será "lo último que haga el director".
"El último día del rodaje, su estado anímico, la forma en que dijo 'adiós'... El no sólo dijo 'adiós' porque el filme hubiese terminado. Lo dijo de una manera que yo sabía que era como decir: 'Esta es la última vez que me voy de un plató de cine como director", afirmó Ullmann en una entrevista con la cadena BBC.
La actriz y directora, de 63 años, es una vez más protagonista en este trabajo del director sueco, que en los últimos tiempos ha trabajado mucho en su faceta de guionista.
Una prueba más de hasta qué punto la carrera de ambos se halla íntimamente ligada es que el famoso realizador, de 85 años, escribió el guión de "Trolosa" (Infiel), dirigida por Ullmann en 2000.
La pareja tuvo una relación sentimental de cinco años, de la que nació la hija de ambos, Linn.
"A veces me molesta y a veces me hace sentir muy, muy orgullosa. Siento que he recibido el regalo de ser una de las mejores amigas de Ingmar Bergman y de tener una de las mejores relaciones profesionales con él", confesó emocionada la actriz.
Con la marcha de Bergman, el Cine pierde a uno de los directores más aclamados de la historia y en cuya filmografía figuran los ya clásicos "Det sjunde inseglet" (El séptimo sello, 1957), "Viskningar och rop" (Gritos y susurros, 1972) y "Hostsonaten" (Sonata de otoño, 1978).
El realizador rodó su último largometraje para el cine, "Fanny och Alexander" (Fanny y Alexander) en 1982, y desde entonces ha reaparecido esporádicamente con algunas producciones televisivas.
El maestro sueco es un hombre con fama de tener una cinematografía depresiva, algo que Ullmann desmintió hoy en Londres al afirmar: "Todas las películas que he hecho con él son lo más entretenido y divertido que he hecho nunca. En ellas hemos bromeado, nos hemos reído", añadió.
En varias ocasiones Bergman ha confesado que, al hacer una película, se basa en sus experiencias personales, en sus problemas de comunicación y en sus emociones más oscuras.
Aunque la pareja ya no está unida sentimentalmente, conservan una muy buena amistad y Ullmann confesó en la capital británica que aún recuerda con cariño algunos de los momentos que vivió con él en la isla sueca de Faro, en la que Bergman aún reside. EFE
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