Lincoln (EEUU), 14 mar (EFE).- El asesino que mató a machetazos en Ruanda a la protectora de gorilas Dian Fossey en 1985 ha sido designado administrador de una oficina de Nebraska encargada de asuntos para enfermos mentales, informaron hoy fuentes oficiales.
Wayne Richard McGuire, un estadounidense que era asistente de Fossey, fue declarado culpable en ausencia de matar a la investigadora en un juicio realizado en Ruanda.
El incidente fue tema de la película "Gorilas en la niebla" en la que el papel de Fossey fue interpretado por la actriz estadounidense Sigourney Weaver.
McGuire, quien ha negado toda participación en el asesinato, ha permanecido en Estados Unidos, país que no tiene tratado de extradición con Ruanda.
"Estados Unidos no ha dado ninguna validez (al juicio). Eso ocurrió hace 20 años. Yo no hice nada", manifestó.
Una portavoz del Sistema de Salud y Servicios Sociales de Nebraska dijo que las autoridades del estado sabían del caso y que, después de conocer la situación en Ruanda en el momento en que ocurrió el asesinato, no creían que el juicio contra McGuire tuviera fundamentos legales.
Sin embargo, el senador estatal, Ernie Chamers, anunció que ordenará una investigación sobre las circunstancias del nombramiento hecho por el Servicio de Salud y Servicios Sociales de Nebraska.
"Pienso determinar las razones por las cuales el sistema y el estado de Nebraska designaron a esta persona. El asesinato es un asesinato. Es inconcebible que el estado lo haya contratado", dijo Chamers.
McGuire era el único extranjero que trabajaba en el Centro de Investigaciones Karisoke, en la ladera del monte Visoke, desde donde Fossey, de 53 años, realizaba una campaña para proteger de la extinción a los gorilas de montaña.
Un guía nativo contratado por Fossey, a quien se acusó de estar involucrado en el crimen, declaró durante el juicio que McGuire mató a Fossey para conocer los detalles sobre sus investigaciones acerca de los gorilas.
Los fiscales afirmaron que McGuire tenía la intención de apoderarse del manuscrito de un libro que escribía Fossey y que debía ser la segunda parte de "Gorilas en la niebla". EFE
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