Buenos Aires, 27 ene (EFE).- El 60 aniversario de la liberación de Auschwitz fue conmemorado hoy en Buenos Aires por dirigentes judíos, religiosos y sobrevivientes de ese campo de concentración nazi en un acto en el que recordaron el genocidio, pidieron memoria y advirtieron sobre un aumento del antisemitismo.
El acto se llevó a cabo en la sede de la Asociación de Mutuales Israelitas Argentinas (AMIA), donde se encendió una vela por cada millón de víctimas del Holocausto y se clamó por que nunca más vuelva a suceder una tragedia similar.
"El objetivo es recordar a las víctimas que murieron en los campos de concentración y generar en la memoria los elementos necesarios para que nunca se puedan olvidar y que nunca más puedan suceder hechos de este tipo", dijo a EFE Benjamín Katzaf, vicepresidente en ejercicio de presidente de AMIA.
La mutualista judía fue blanco de un ataque terrorista que el 18 de julio de 1994 causó 85 muertos y cientos de heridos, y siguió al atentado con coche bomba que dos años antes destruyó la Embajada de Israel en Buenos Aires y dejó 29 muertos y más de cien heridos.
Argentina, donde reside la mayor comunidad judía de América Latina, acoge a unos 200 sobrevivientes del Holocausto, según datos de la comunidad judía local.
"Hoy se está evocando la liberación de Auschwitz, que es como una moneda de dos fases", dijo a EFE Jorge Kirszenbaum, vicepresidente en ejercicio de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA), el brazo político de la comunidad judía en el país.
"Por un lado es la celebración de la libertad y por el otro es la evocación de aquel trágico episodio del siglo XX, por el cual todavía la filosofía o la historia le deben una respuesta a la Humanidad", agregó el representante, que más temprano participó en otro acto realizado en el "Museo del Holocausto" de Buenos Aires.
Ambos líderes judíos alertaron sobre una creciente ola de antisemitismo, especialmente en Europa, un asunto que fue examinado en el último Congreso Judío Mundial, celebrado en Bruselas.
"Las fuerzas del oscurantismo siguen vigentes y hay gente que aún se atreve hasta a negar el Holocausto (...) Donde más ha crecido el antisemitismo es en Europa y ahí los gobiernos tienen la palabra", afirmó Katzaf.
Durante el acto en la AMIA también tuvo la palabra Eugenia Unger, una mujer de 78 que sobrevivió a Auschwitz y aún conserva en su brazo izquierdo un sello con el número 48914.
"El genocidio fue algo preparado, meditado", dijo Unger con lágrimas en los ojos y pidió que "la memoria no se olvide de esto".
El recuerdo de Auschwitz y su maquinaria de muerte estuvo presente en distintos actos alrededor del mundo, el principal en el memorial internacional de Birkenau, en Polonia, donde participaron líderes de 38 gobiernos y unos mil sobrevivientes del Holocausto.
"Los no creyentes suelen decir que Auschwitz es la prueba concreta de la inexistencia de Dios y, por otro lado, los creyentes dicen que se comprueba la existencia de Dios en la existencia del pueblo judío a pesar de Auschwitz", concluyó el titular de DAIA. EFE
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