El sherif dijo, por otra parte, que los dos adolescentes, Dylan Klebold y Eric Harris, que se suicidaron luego de haber atacado su liceo con armas y explosivos el martes, habían elegido de manera deliberada la hora de su ataque (las 11H15) en la cafetería y la biblioteca del colegio, para provocar el mayor daño posible.
Varios centenares de jóvenes almorzaban a esa hora en la cafetería, y decenas de otros aprovechaban la pausa de la comida para estudiar en la biblioteca.
Según el sherif, los adolescentes esperaban que la bomba de propano que habían escondido en la cocina cerca de la cafetería explotara e incendiara el colegio. Luego, habían previsto "matar a la mayor cantidad de gente posible" en el vecindario.
El jefe de la policía local añadió que los dos jóvenes tenían luego previsto, si sobrevivían, "secuestrar un avión y estrellarlo contra una ciudad importante".
Según un diario íntimo hallado en el domicilio de uno de los dos muchachos, estos habían planificado con mucho cuidado la matanza desde abril de 1998.
Por otra parte, las autoridades indicaron este lunes que buscaban a una alumna, sospechosa de haber comprado al menos un arma que sirvió para la masacre del liceo Columbine.
El portavoz del sherif, Steve Davis, precisó por el canal de televisión ABC que la joven, mayor de edad y amiga de Dylan Klebold, de 17 años, aún no fue inculpada ni detenida.
La edad legal es de 18 años para comprar armas en el Estado de Colorado. Dylan Klebold tenía 17 años y Eric Harris había cumplido 18 muy recientemente, según el sherif.
Edición periodística: Adriana Quirós Robinson, La Nación Digital.
Fuente: agencias.
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