EscucharLos Angeles (EE.UU.). La actriz Winona Ryder fue condenada hoy a tres años de libertad condicional, a pagar una multa de 3.700 dólares y a cumplir 480 horas de servicio comunitario por robar en una tienda de ropa de lujo de Beverly Hills (California).
El juez Elden S. Goz leyó la sentencia en presencia de la actriz de 31 años, sorprendida cuando robó bienes por valor de más de 6.000 dólares en los grandes almacenes Saks Fifth Avenue, y le advirtió de que "la próxima vez que cometa un robo irá a la cárcel".
El magistrado del Tribunal Superior de Beverly Hills manifestó que con la sentencia no intenta "dar ejemplo", y aseguró que ha tratado a Ryder "con la misma dureza o la misma indulgencia con la que hubiera tratado a cualquier otra persona".
La actriz no hizo ninguna declaración tras conocer la sentencia y se limitó a contestar que se daba por enterada cuando el juez le explicó que si vuelve a delinquir irá a parar a la cárcel.
La protagonista de "La Edad de la Inocencia" también tendrá que restituir a Saks el dinero en el que estaba valorada la mercancía robada por valor de 5.560 dólares y un bolso de marca, valorado en 795 dólares, que resultó dañado durante el robo.
El magistrado Goz explicó que la actriz deberá servir a la comunidad trabajando en un programa social sobre drogadicción y ayuda a personas con problemas psicológicos.
Goz lamentó que Ryder no haya mostrado arrepentimiento en ningún momento por lo que hizo, y le reprochó que "haya decepcionado a tanta gente que ha disfrutado y se ha sentido inspirada por su talento y actos de bondad durante muchos años".
El abogado defensor de la actriz, Mark Geragos, manifestó en su alegato final antes de la sentencia que su defendida ha sido objeto de una campaña en contra de su imagen, y acusó a la fiscalía "de haber hecho todo lo posible para destruir a esta mujer".
Geragos volvió a recordar el compromiso social de Ryder durante los últimos años y reiteró el ejemplo, ya utilizado en el juicio, de la recompensa que puso de su bolsillo para tratar de encontrar al asesino de Polly Klaas, una niña secuestrada de su casa en 1993.
La principal prueba de cargo contra la actriz fue una cinta de vídeo de los servicios de seguridad de Saks, en la que se puede ver a Ryder paseando por la boutique y eligiendo prendas de ropa con las que salió de la tienda sin haberlas pagado.
Inicialmente, la actriz dijo que ensayaba para un papel de cine y, durante el juicio, su defensor aseguró que Ryder pensó que Saks le mantendría "abierta" una cuenta tras haber adquirido anteriormente ropa, extremo que fue negado por esa tienda.
Durante el juicio, la fiscalía aseguró que Ryder era sospechosa de haber robado en al menos otras dos ocasiones en los últimos años en almacenes de lujo de Beverly Hills, pero no presentó cargos.
Edición periodística: Gerardo González y Juan Fernando Lara . Fuente: agencias.
