El secreto sobre un excepcional conjunto de obras de Pablo Picasso que Dora Maar -uno de los grandes amores del pintor malagueño- guardó celosamente hasta su muerte, hace un año, empezó a ser develado esta semana por los especialistas en valoración de obras de arte en París.
Esos peritos tasadores desintegrarán el grupo de obras en una venta, los días 27, 28 y 29 de octubre. Las firmas Piassa y Mathias ofrecerán diez óleos y un sinfín de dibujos, libros ilustrados, joyas, recortes, pequeñas esculturas, cartas, piedras talladas y fotografías, bajo el título Los Picasso de Dora Maar.
Estos objetos del artista están valorados en 150 millones de francos ($25 millones; aproximadamente, ¢6.600.000 millones), una estimación de salida que ha querido ser "prudente", mas los peritos tasadores creen que superará con creces esta cifra.
El carácter excepcional de las obras, cuidadosamente reunidas por Dora Maar (1907-1997), se debe, sin duda, a la calidad de las piezas, pero también al valor sentimental de su contenido.
Dora Maar, la fotógrafa y pintora de 29 años que Picasso conoció en 1936 en la "brasserie" Les Deux Magots (bulevar de Saint Germain), dejó a la posteridad una enorme colección de arte y un álbum de recuerdos.
En ese álbum encalló inevitablemente su vida, pues la depresión, la enfermedad y la soledad la invadieron cuando perdió a Picasso, el compañero de "La mujer que llora", como le gustaba a él calificar a su compañera en el período de entreguerras.
La Dora amada
Entre otros secretos, la musa del óleo "La mujer que llora", una de las piezas claves, saldrá a subasta.
Para la historia del arte, las obras pertenecen a uno de los períodos más importantes del artista, el comprendido entre 1937 y 1944, en el cual comienza el Guernica, obra trágica que Dora Maar siguió de cerca como musa, compañera y fotógrafa.
Testigo de esa misma época es un óleo de 1937 con la figura de una mujer inspirada por la Guerra de España. De las numerosas obras que subastarán, los expertos destacan igualmente los entrañables dibujos a la pluma o lapicero de Dora, a menudo fechados y con anotaciones, el autorretrato de Picasso con pipa y un retrato de Max Jacob.
Entre los libros, brilla el magnífico volumen denominado el Buffon, con cuarenta grandes dibujos creados en una tarde de 1943 para Dora Maar y un manuscrito del poeta Paul Eluard adornado también por Picasso.