La cantidad de personas que perdieron la vida en las calles de nuestro país llegó a 457 este domingo, superando la totalidad de decesos que se contabilizaron durante el 2016, cuando la cifra fue de 456.
Solo en la madrugada de este 31 de diciembre, cuatro motociclistas perdieron la vida, en accidentes registrados en Pococí, San Carlos y Cañas.
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Además, la noche del sábado un peatón murió atropellado en Orotina.
Epidemia
En los últimos cinco años, casi 2.000 personas han muerto producto de colisiones, atropellos o vuelcos.
El año pasado, Costa Rica registró una cifra récord de muertes, cuando perecieron 456 personas. La cifra implicó un fuerte golpe a la seguridad en las carreteras, pues estuvo muy por encima de los menos de 400 decesos registrados en el 2015.
Este año, lejos de reducirse la mortalidad, la tendencia se mantuvo igual, según datos de la Policía de Tránsito que solo incluyen a las personas que fallecen en el sitio del accidente.
La tasa de mortalidad por accidentes viales pasó de 5,39 por cada 100.000 habitantes a 9,16, entre el 2013 y el 2016, pero ese dato no toma en cuenta a quienes fallecen en hospitales o clínicas. La cifra completa es mayor.
Un mal se considera epidemia cuando supera las 10 muertes por cada 100.000 habitantes.
En asesinatos, el país ya supera la tasa de 11 por cada 100.000 habitantes. Este 2017, se alcanzó la inédita cifra de 579 homicidios.
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Sonia Monge, subdirectora de Tránsito, lamentó que las muertes en carreteras no cedan pese a las campañas que ha lanzado el Gobierno, las cuales incluso han integrado a las municipalidades.
“Hemos puesto toda nuestra parte, incluso con Cosevi (Consejo de Seguridad Vial) se han hecho operativos bastante fuertes, se han enfocado mucho en motocicletas, hay gran cantidad de motocicletas que se han decomisado".
"Aun así, la gente sigue andando en situaciones irregulares, motos que no son las más aptas, vehículos sin documentos, sin marchamos, conductores sin licencia que no han aprobado ni el curso teórico y mucho menos el práctico, en condiciones mínimas para conducir", afirmó Monge.
La subdirectora de Tránsito insistió en hacer un llamado a los conductores: “Se vale respetar las leyes de tránsito por el bien de todos, son 30 segundos lo que dura un cambio de luz en el semáforo, es mejor esperar que dejar la vida ahí”.