Este último es el nombre del modelo que el gobierno anunció para permitir mayor movilización de personas y mayor funcionamiento de establecimientos comerciales.

La apuesta para esa apertura es la responsabilidad, aspecto en el que hizo énfasis el presidente de la República, Carlos Alvarado.

“Este modelo de gestión es uno donde todos tenemos que ser responsables de nuestro cuido, siempre usar la mascarilla, protocolo de estornudo, lavado de manos, distanciamiento, respetar burbujas y no exponernos innecesariamente”, advirtió.

La responsabilidad no solo es asunto de los individuos, sino también de instituciones, municipalidades y establecimientos comerciales. De no cumplir ese compromiso se reflejará en un repunte de contagios, lo que obligaría a retroceder, como ocurrió meses atrás.

“Es importante que todos pongamos de nuestra parte en este proceso, porque llevaremos indicadores de seguimiento de la evolución y cuando nos levantan alertas, si las cosas no van en la dirección correcta, tendremos que tomar medidas para devolvernos, pero eso depende de qué tan bien nos comportemos”, añadió.

Para Álvaro Sáenz, presidente de la Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones del Sector Empresarial Privado (Uccaep), este mecanismo de apertura con responsabilidad debió haberse aplicado desde marzo.

“Aquí no hay que dar martillos para lidiar con la enfermedad. Con las tres medidas: distanciamiento, higiene y mascarillas,. uno tiene que seguir trabajando”, dijo.

Sáenz celebró la flexibilización y reconoció la responsabilidad que viene desde los ciudadanos hasta los negocios con la aplicación de protocolos.

“Entre todos podemos sacar esto adelante y no castigando la actividad económica”, declaró.

1.000 casos

Alvarado hizo el anuncio este miércoles, cuando se registraron 1.002 nuevos enfermos de covid-19. De esos, 800 se confirmaron por pruebas en laboratorio y 202 por nexo epidemiológico.

La cifra de casos diarios es la tercera más abultada. En los últimos días también hubo reportes de 1.011 y 1.059.

La cifra acumulada de casos es de 36.307, cifras proyectadas para el próximo mes, en el peor de los escenarios, según estimaciones de la Escuela de Matemática de la Universidad de Costa Rica.

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El reporte epidemiológico lo dio el ministro de Salud, Daniel Salas, mediante una videoconferencia desde su casa, donde cumple aislamiento, luego de que papá diera positivo, al parecer, tras ser contagiado en el hospital en el cual permanece.

De acuerdo con Salas, hay 400 personas en centros médicos, de ellos 143 en Unidad de Cuidado Intensivo (UCI). Estos pacientes críticos tienen entre 1 y 92 años.

Reportó también 10 fallecimientos en las últimas 24 horas, cinco hombres y cinco mujeres, con edades que van de 63 a 86 años. Las muertes asociadas a la enfermedad llegan a 386, con edades de 21 a 100 años.

Así como el ministro de Salud, también el presidente de la Comisión Nacional de Emergencias (CNE), Alexánder Solís, permanece en aislamiento por contacto con una persona infectada.

Restricción unificadas

El principal cambio que traerá el modelo de “Costa Rica trabaja y se cuida” es que desde el 31 de agosto y hasta el 30 de setiembre se unifica la restricción vehicular. Es es decir, todo el país tendrá el mismo horario, tanto cantones bajo alerta amarilla, como aquellos en naranja e incluso zonas fronterizas.

La circulación de vehículos, se permitirá de 5 a. m. a 10 p. m. entre semana, y de 5 a. m. a 8 p. m. los fines de semana.

De lunes a viernes, NO circulan

Lunes: placas terminadas en 1 y 2

Martes: 3 y 4

Miércoles: 5 y 6

Jueves: 7 y 8

Viernes 9 y 0

Fines de semana, NO circulan

Sábado: placas terminadas en número par

Domingo: placas terminadas en número impar

La unificación en restricción vehicular incluye a los cantones fronterizos, que habían estado con los horarios más rigurosos. Además, se suspende la restricción de navegación en los ríos Medio Queso, Frío, Sistema de Canalización del Caribe Norte (Canales de Tortuguero), Colorado, Sarapiquí y San Carlos.

“Estamos orientando un proceso de trabajo conjunto. Este modelo busca la capacidad de enlazar los esfuerzos en territorios para disminuir el impacto en la salud; poder disminuir el impacto que ha generado la atención y el impacto social mediante participación activa, de empresas privadas, comunidades en conjunto, con instituciones”, expresó Sigifredo Pérez, jefe de operaciones de la Comisión Nacional de Emergencias.

Es decir, busca, mayor apertura económica, sin descuidar el cumplimiento de los protocolos sanitarios.

Pérez reiteró la advertencia de que si no hay cumplimiento de medidas y aumentan los casos, habrá que buscar otras para disminuirlos.

El mandatario, por su parte, citó el ejemplo del turismo, donde, según reporte de ese ministerio que ha inspeccionado unos 80 hoteles, el 70% tiene “cumplimiento bueno”.

“Vi reportes de un hotel de renombre que no está cumpliendo, pero vi personas cancelando reservaciones proque los propios reviews dicen que no se está cumpliendo y sí a lugares donde ven ordenado, aforos. El mensaje es que tenemos que seguir adelante trabajando y cuidándonos”, añadió.

En setiembre también se reanudan vuelos desde Estados Unidos al aeropuerto Juan Santamaría y al Daniel Oduber, de Liberia, aunque solo de seis ciudades de aquel país.

Meses atrás tambień se anunció para setiembre el posible retorno a clases presenciales, pero hasta ahora no se ha informado de las condiciones o bien, si se postergará.

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Dos fases para comercios

En cuanto al funcionamiento de comercios, el modelo avanza en dos fases. La primera de nueve días, considerada de transición, y la segunda de apertura controlada.

“Consiste en profundizar un modelo que hace un balance entre la salud y la vida de las personas y la economía y el empleo. Durante toda la pandemia hemos mantenido la mayor cantidad de actividades productivas, hemos abierto las playas, hoteles, vuelos, más establecimientos, es necesario ir un paso más adelante”, manifestó.

Así, del 31 de agosto al 8 del próximo mes habrá un periodo de ajuste que solo afectará a los 23 cantones en alerta naranja. Durante esos días habrá medidas de restricción en ciertos establecimientos.

Por ejemplo, ferreterías, ventas de matriales, reparación de vehículos no tienen restricción de horario, pero deberán cumplir el aforo de 50%. Los hoteles al 100%, excepto en áreas comunes, que deben estar al 50%.

Restaurantes, sodas, cafeterías, tiendas, salones de belleza, barberías y estéticas pueden dar servicio al 50%, de 5 a. m. a 10 p. m.

Para esos días de transición, en cantones bajo alerta naranja no podrán abrir los gimnasios, ni tampoco realizarse actividades religiosas.

El miércoles 9 de setiembre se inicia la fase de apertura controlada.

“A partir del 9 de setiembre y hasta el 30 de ese mes será la fase de apertura controlada de los establecimientos en un horario de lunes a viernes desde las 5 a. m. y hasta las 10 p. m., y de sábados a domingos desde las 5 a. m. y hasta las 8 p. m., respetando el cincuenta por ciento (50%) de su capacidad máxima de aforo”, informó la Casa Presidencial.

Aquí sí se permitirá la apertura de gimnasios con el mismo horario de la circulación de vehículos y al 50% de capacidad. También se permitirán las actividades religiosas, pero con no más de 75 personas, igual que los eventos en salones.

Sin embargo, actividades que seguirán prohibidas son todas las que impliquen concentración masiva como topes, conciertos, turnos o festejos populares, en razón de su alto nivel de riesgo de contagio.

También siguen sin permitirse la apertura de bares, casinos, discotecas, balnearios y juegos para niños.

En cuanto a playas, se permitirá el acceso de 5 a. m. a 2:30 p. m. en todo el país.

Se habilitan actividades deportivas sin público, con base en una lista divulgada por el Ministerio de Deportes.

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