Llegada de vehículos eléctricos a Costa Rica camina a paso récord en 2023

En los primeros cuatro meses de este año, se inscribieron 1.501 nuevos vehículos eléctricos, es decir, 1.008 más que en el mismo periodo del 2022, según los datos del Ministerio de Ambiente y Energía (Minae), entidad encargada por ley de contabilizar esta información.

La cifra del primer cuatrimestre del 2023 es, por sí sola, mayor que la de esos mismos periodos del 2020, 2021, y del 2022 juntos, en los que llegaron un total de 1.435 vehículos eléctricos al territorio nacional, de acuerdo con los registros del Minae.

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En promedio, en los primeros cuatro meses del 2023 se inscribieron poco más de 375 vehículos cada mes. Según los datos del Minae, con base en el Registro Nacional de la Propiedad, desde el 2017 hasta diciembre del año pasado, solamente en una ocasión se había inscrito una cifra superior al promedio del año en curso.

Silvia Rojas, directora ejecutiva de la Asociación Costarricense de Movilidad Eléctrica (Asomove), manifestó que hay varios elementos que han confluido para que se de este incremento. Entre ellos la seguridad jurídica que brinda la ley sobre movilidad eléctrica, sumado al trabajo de sectores como importadores, distribuidores de electricidad y, sobre todo, la experiencia de los usuarios

Juan Ignacio Sansó, gerente de ventas de BMW, coincidió en que este comportamiento responde a una mayor confianza en los consumidores respecto al desempeño de estos vehículos, pues las personas han comprobado que es posible hacer viajes con distancias considerables debido a que las baterías poseen cada vez más autonomía.

Sansó añadió que otro aspecto que ha incidido en el incremento de las ventas son las condiciones de financiamiento ,ás favorables para adquirir un vehículo eléctrico, así como el crecimiento de la red de cargadores eléctricos, y los beneficios que otorga la ley.

Con la llegada de estos vehículos, el parque de automotores eléctricos en Costa Rica alcanzó las 8.001 unidades, las cuales están distribuidas entre 5.420 automóviles, 1.105 motocicletas, y 1.476 en equipos especiales, que incluye carros de golf, cuadraciclos, montacargas, y vehículos de trabajo. Al cierre del 2022, la cifra fue de 6.500.

En sus proyecciones de crecimiento, la Dirección de Energía del Minae previó que este año culminara con 7.963 vehículos eléctricos inscritos; sin embargo, la cifra ya fue superada pues para abril del 2023 el parque de vehículos eléctricos alcanzó los 8.001 unidades.

Desde el 2018, la llegada de vehículos de este tipo ha ido en crecimiento, pues en ese año se aprobó la Ley de Incentivos y Promoción para el Transporte Eléctrico, que brindaba algunos beneficios para este tipo de medios de transportes con motores eléctricos.

Posteriormente, en junio del 2022, entró a regir Ley de Incentivos al Transporte Verde, que en esencia amplía hasta el 2035 algunos beneficios ya vigentes desde el 2018. Esta legislación aplica para vehículos eléctricos usados hasta con cinco años de antigüedad.

Entre los incentivos están la exoneración temporal, con una aplicación gradual, de los impuestos del valor agregado (IVA), selectivo de consumo y sobre el valor aduanero en la importación de estos vehículos hasta el 2035. También se exime un porcentaje del impuesto a la propiedad.

Mayor interés

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En un contexto de mayor confianza e interés por los vehículos eléctricos de parte de los consumidores, también se ha ampliado la oferta de distintos modelos de vehículos de las diferentes marcas de carros disponibles en el mercado costarricense.

Rojas mencionó que la experiencia de los usuarios que ya se han animado a hacer el cambio a un vehículo eléctrico para experimentar por ellos mismos el funcionamiento de la tecnología ha ido alimentando el interés de los consumidores por estos automotores.

“Informar a las personas es clave, ya muchos tienen claro que el vehículo eléctrico es potente, más cómodo, saben que las nuevas baterías pueden durar hasta más de 15 años y que son mucho más baratos de mantener que uno de gasolina, diésel o híbrido”, agregó.

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Según Sansó, el país está actualmente en un período de transición en la industria donde hay consumidores cada vez más informados y más dispuestos a dar el paso a la movilidad eléctrica, lo que hace a las marcas considerar a Costa Rica como un mercado de interés donde pueden tener una mayor oferta.

Rodolfo Araya, director comercial regional Hyundai Grupo Q, comentó que hay una demanda creciente, pero también hay un aumento en la oferta que está satisfaciendo esas necesidades por parte de los consumidores hacia la transición a la movilidad eléctrica.

De acuerdo con los datos del Minae, actualmente se comercian 24 marcas con 45 modelos diferentes de vehículos de este tipo en el país. En este registro se incluyen camiones, automotores tipo Van, y otros como automóviles o ‘SUV’ (Sports Utility Vehicle, por sus siglas en inglés).

En el caso de BMW, para el 2022 vendieron 113 autos eléctricos, lo que representa un 220% más que el 2021, mientras que en lo que va de este año el 23% de las ventas de la marca corresponden a este tipo de vehículos. En el caso de MINI, que es distribuida también por Red Motors, el modelo electric representa el 70% de las ventas.

“Tenemos una demanda alta de autos eléctricos, sin embargo, aún no logramos satisfacerla por la disponibilidad de inventarios del fabricante”, comentó Sansó. En esa misma línea, Araya también reconoció que en Hyundai la dinámica ha sido similar.

“La capacidad de producción de Hyundai fábrica es limitada, por lo que localmente nos ha costado satisfacer la demanda que tenemos. Esto se debería poder resolver en un mediano plazo según el fabricante”, manifestó el director comercial regional de la marca.

Cobertura

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Actualmente, en Costa Rica hay 53 centros de carga rápida (batería de carro llega hasta 80% en 30 minutos) de empresas proveedoras de energía y más de 250 cargadores semi rápidos (carga toma unas cuatro horas) en sitios como ferreterías, restaurantes y centros comerciales, indicó Rojas.

La directora ejecutiva de Asomove también recordó que el vehículo eléctrico se puede cargar en cualquier tomacorriente de 120 o 240 voltios. “Eso hace que prácticamente cualquier lugar con electricidad sea bueno para cargar su vehículo. De hecho la mayoría de cargas se realizan en casa”, comentó.

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Esto hace que la red de carga sea robusta a nivel nacional, debido a la amplia cobertura de electricidad en todo el país, de acuerdo con Rojas. “A medida que avanzamos vamos superando nuevos retos, pero ya ha quedado demostrado que Costa Rica está lista para la movilidad 100% eléctrica, y que además somos referentes en el tema.

Sin embargo, reconoció que frente a esta transición energética en el parque vehicular nacional es necesario valorar nuevos modelos de negocio que permitan tener más cargadores disponibles por punto de carga, así como dar el salto hacia el transporte público 100% eléctrico.