EscucharLa muerte del hijo de Maribel Guardia, Julián Figueroa, de 27 años, a causa de un fallo en el corazón lleva a preguntarse cómo una persona tan joven y aparentemente sana puede fallecer de manera repentina por un fallo cardíaco.
Aunque solo conociendo directamente el caso y viéndolo a fondo se podrá saber qué sucedió específicamente con él, es un hecho que las afecciones cardíacas en estas edades son muy raras, pero no imposibles, afirmó la médica Fernanda Hernández.
Dentro del parte médico de Figueroa se dan dos razones del deceso, ambas relacionadas con el corazón: un infarto agudo al miocardio y una fibrilación ventricular. Repasemos primero qué significa cada una de ellas.
El miocardio es el músculo del corazón. Un infarto allí puede comenzar a gestarse años antes, con la acumulación de una placa de calcio o grasa en las arterias, la cual, poco a poco, dificulta el paso normal de la sangre. Las arterias coronarias son particularmente importantes porque son las encargadas de llevar sangre y oxígeno al corazón. Si el flujo sanguíneo se bloquea, el corazón sufre por la falta de oxígeno y las células cardíacas mueren. Allí se produce un infarto.
Por su parte, una fibrilación ventricular es un tipo de ritmo cardíaco irregular (arritmia). En ella, las cámaras inferiores del corazón se contraen de forma muy rápida y descoordinada. Como resultado, el corazón no bombea sangre al resto del cuerpo.
De acuerdo con la Clínica Mayo, esta es la causa más frecuente de muerte cardíaca súbita.
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En personas jóvenes
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Las personas jóvenes pueden tener infartos, aunque esto no es frecuente. Fotografía: Shutterstock (Shutterstock)
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De acuerdo con Hernández, los decesos en personas menores de 60 años por afecciones cardíacas se dan por males congénitos, especialmente genéticos, que se desarrollan en ocasiones sin que la persona se percate y detonan en un infarto o arritmia que puede ser fulminante. Algunos de estos males pueden llevar a problemas en el funcionamiento eléctrico del corazón que desembocan en latidos irregulares.
El cardiólogo costarricense Andrés Garzona agregó: “hay personas que hacen ejercicio y han sufrido un infarto, porque tienen niveles elevados de triglicéridos o se debe a su genética u otros factores, eso sí, en una condición sedentaria el problema hubiera avanzado más rápido“.
Por su parte, el cardiólogo colombiano Darío Echeverri dijo a Noticias Caracol que en estas personas ya hay problemas, por ejemplo, del funcionamiento de las arterias coronarias o en problemas de latidos del corazón.
Las arritmias también pueden tener condiciones genéticas y podrían ser factores de riesgo para enfermedades más serias o incluso son causales de muerte en algunas personas.
Sin embargo, se debe añadir que hay personas jóvenes que luego de años de malos hábitos desde niños, desarrollan enfermedades que pueden afectar al corazón.
“Cabe notar que cada vez es más común que personas jóvenes desarrollen placas que se forman en los vasos sanguíneos, esto puede llevar a enfermedades crónicas que, si no se controlan, pueden desembocar en un infarto a edades tempranas”, aseguró Hernández.
No hacer actividad física, comer en demasía (especialmente grasas y azúcares), fumar o consumir otras drogas y altos niveles de estrés pueden aumentar el riesgo de este tipo de padecimientos en jóvenes.
Por otra parte, el consumo de algunas drogas y su abuso también está relacionado con debilitamiento del corazón.
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Muerte súbita
Tanto en quienes tienen problemas congénitos como en quienes no los tienen pero cuyos hábitos de vida los llevan a enfermar del corazón, la muerte puede llegar sin mayor aviso.
Garzona insistió que si las emergencias cardíacas no se tratan en el sitio de manera rápida y adecuada, únicamente un 5% de las personas llegan con vida al hospital. Esto pudo ser lo que eventualmente sucediera con Figueroa, quien según la prensa internacional se recostó al sentirse mal.
A pesar de ser poco predecible e inesperada, la muerte súbita cardíaca puede recuperarse si se realizan con prontitud maniobras de resucitación cardiopulmonar (RCP) y la terapia de desfibrilación, aseveró el cardiólogo.
No es tan fácil de detectar porque no siempre esos cambios en los latidos son fáciles de percibir. Algunos duran solo unos segundos. ¿A qué se le debería prestar atención? Dentro de los síntomas de un problema cardíaco están dolor en el tórax, desmayos, mareo, vértigo, palidez, palpitaciones, dificultad para respirar y sudoración.
El especialista tico manifestó que es necesario conocer la historia familiar ¿hubo personas muy cercanas que tuvieron muertes súbitas cuando eran muy jóvenes? Estas personas podrían tener cierto grado de predisposición genética.
Otro aspecto es fijarse en padecimientos que no sean normales, como desmayos súbitos o que ocurrieron durante el ejercicio. También, palpitaciones más fuertes de las esperadas cuando se está haciendo ejercicio.
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