¿Se puede disfrutar de la Navidad de una forma responsable con el medio ambiente?, voceros de tres organizaciones involucradas con el desarrollo sostenible en Costa Rica opinan que sí.
“Claro que podemos disfrutar de una Navidad más amigable con el medio ambiente, depende solo de nosotros lograr hacer cambios en nuestras rutinas y vidas diarias para ser personas más responsables y cambiar nuestro mindset (mentalidad)”, aseguró a La Nación el vicepresidente de la Asociación Preservacionista de Flora y Fauna (Apreflofas), Felipe Hernández.
Para Kryssia Brade, oficial a cargo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en Costa Rica, “consumir bajo patrones responsables garantizan los derechos humanos y la sostenibilidad ambiental”.
“Es importante que pensemos antes de consumir si realmente necesitamos lo que estamos adquiriendo, idealmente, es necesario considerar a la hora de escoger un producto dónde terminará después y cómo afectará al medio ambiente y a las demás personas”, agregó.
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Mientras que el director de la Fundación Neotrópica, Bernando Aguilar, recordó también la necesidad en esta época, “de consumir de forma consciente, tener mucho cuidado con la generación de desechos y clasificarlos”.
“No solo es lo que compremos en los comercios, sino también los desechos que producimos. Probablemente, el 24 y 25 de diciembre son dos de los días de más generación de residuos en el país”, expresó el vocero.
Aguilar hizo un llamado para que las acciones de los ticos en Navidad no “cancelen todo lo que ganamos en el país con el esfuerzo que hacemos con el fin de preservar nuestras áreas protegidas, nuestros bosques, etcétera".
Medidas al alcance de todos
Las opciones para hacer de esta Navidad una más ecológica, están al alcance de la mano de todos los ticos, y van desde las que se encuentran disponibles en los comercios, hasta las que se pueden elaborar con un poco de creatividad, que también le podría significar un ahorro de dinero.
Por ejemplo, Hernández recomienda planear bien las compras, elaborando previamente una lista de necesidades, lo que permitiría coordinar la movilización a lugares donde se puedan conseguir estos productos y hasta evitar pagar por cosas innecesarias.
Si aún no ha comprado decoraciones navideñas, en lugar de adquirir objetos hechos de plástico, puede conseguir otros elaborados a partir de materiales reciclados e incluso intentar hacer los suyos usando ropa vieja, paletas de helados, cajas, entre otros.
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La donación es otra opción sencilla, ya que “muchas de nuestras cosas pueden reusarse y compartirse con otras personas", dijo Brade. Eso sí, los objetos deben estar en buen estado.
“El comportamiento de consumo en Costa Rica es lineal, eso quiere decir que compramos, usamos y desechamos contrario a la economía circular (...). Las repercusiones a la salud humana ante la inadecuada disposición de los residuos son alarmantes, terminan depositadas en los ambientes y entornos naturales y se nos regresan directamente o indirectamente”, explicó la representante del PNUD.
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Por su parte, Aguilar destacó la necesidad de evitar el desperdicio de alimentos, servir con mesura y solo lo que se va a consumir.
“Preparar alimentos que demuestren una celebración de la época que es especial y que no demuestren una ostentosidad innecesaria o insostenible”, recalcó.
El director de la Fundación Neotrópica recordó que para el mes de agosto, "habíamos consumido todos los recursos que teníamos disponibles para este año según Global Footprint Network (Red Global de la Huella Ecológica). Por consiguiente, se podría decir que estamos viviendo de 'a crédito’ con la Tierra, lo cual reafirma que no debemos consumir más allá de lo que requerimos.