De nuevo, Jonathan Moya, el goleador suplente de los morados, acabó por convertirse en un elemento vital para que Saprissa siga con vida en sus aspiraciones de lograr el título.
Moya anotó su sétimo gol en la campaña frente a Herediano, una cifra que alcanzó con un mérito adicional: jugó la mayoría de veces de relevo.
Aun cuando le anotó a Pérez Zeledón el pasado fin de semana, el delantero regresó al banco para este duelo al cederle su lugar a David Ramírez.
Al minuto 45, cuando el partido estaba igualado a cero, el estratega Carlos Watson lo introdujo a la cancha con la consigna de siempre, rondar el área y buscar la anotación.
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“Sabía que en Pérez se había hecho un desgaste considerable y el profesor decidió utilizar a David Ramírez para tener la pelota. Uno respeta las decisiones y apoya al compañero. Y bueno, me tocó entrar en el segundo tiempo y sabía que tenía que ir con todo”, dijo Moya.
Se jugaban apenas cinco minutos, cuando el ariete recepcionó un pase filtrado de Marvin Angulo y de primera remató a puerta para conseguir el gol.
El delantero lo celebró con mucha euforia, se besó el escudo, corrió a una esquina y se abrazó con sus compañeros.
Es la diana número siete de Moya en los 779 minutos que suma en el campo de juego. Es decir, un gol cada 111 minutos.
Moya es el jugador más efectivo de Saprissa en la red.
“Los delanteros vivimos de goles”, concluyó Moya.